Todo un vocabulario tecnológico en la mano y un análisis a fondo de la guerra comercial actual revelan que José M. Gay de Liébana es un apasionado de aquello que hace. En su último libro, Revolución tecnológica y nueva economía -que presenta esta tarde en la plaza del Inversor del certamen Forinvest de València- profundiza en las relaciones comerciales entre Occidente y Oriente, el 5G, Samsung, Huawei, Ericsson, Donald Trump... y toda una serie de palabras clave que podrían salpicar este texto de negritas. VIA Empresa habla con él unos días antes de la presentación, cuando también visita la ciudad para participar en jornadas y conferencias en Alzira y en la capital, en concreto, en el hotel balneario Las Arenas. "Esta ya no es la València de los años ochenta o noventa, decadente y pobretona. Con la excusa de la Copa América cogió fuerza y ahora está empujando fuerte", afirma el profesor de la Universitat de Barcelona.
"¿Eso cree?", preguntamos. "Si, la Copa América aquí ha sido la excusa como lo fue en Barcelona la celebración de los Juegos Olímpicos", apunta. Para Gay de Liébana, el "carácter y empuje de los empresarios valencianos" ha sido determinando por el florecimiento de la ciudad. Avala el buen trabajo del naviero Vicente Boluda, presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios y sobre todo señala al propietario de Mercadona, quien está en su top ten. "Juan Roig lo hace todo muy bien, soy un devoto admirador suyo. Pasó sus momentos malos, como todos, pero tiene un equipo directivo que ha ido renovando. En 2007-2008 cambia su relación con los proveedores, ganándose alguna mala relación con las grandes marcas, pero ha puesto en los altares a la marca blanca. Aporta mucho valor añadido a productos de primera calidad a un precio realmente bueno", destaca.
También cita otra empresa valenciana, en este caso de Castelló, Porcelanosa, con la cual reconoce tener buena relación personal. "Porcelanosa tiene un posicionamiento de marca que la une a la calidad y a la sofisticación. Marcan estilo", apunta. Y cuenta la anécdota de cómo la firma ha cerrado su tienda de Passeig de Gràcia en Barcelona mientras mantiene la de la 5th Avenue de Nueva York. "Allá entra todo el mundo, de todas las nacionalidades. Es un escaparate". Donde se ubica una empresa no es una decisión tomada a la ligera, apunta. Y hace referencia a la expansión, despacio, que está haciendo Mercadona en Portugal. "Se ha concentrado en hacerlo tranquilamente con una internacionalización de riesgo controlado, de hecho el primer establecimiento está a unos 30 kilómetros del centro logístico de Castilla y León. Y encima, es que Roig no tiene ni un euro de crédito bancario, no le debe de nada a nadie".
"Juan Roig lo hace todo muy bien, ha puesto en los altares a la marca blanca"
Mientras conversamos, el hotel es sede del encuentro anual de la marca automovilística Honda, que atiende a sus invitados en un mostrador alterno a la recepción. Además, turistas extranjeros van entrando en el lobby, cargados con maletas y vistiendo, a pesar del mes de febrero, camisetas, pantalones y algunas sandalias de playa. "València está encontrando el equilibrio adecuado, tiene una parte buena también que es la consolidación de turismo de sol y playa", considera. Además, el autor destaca la implicación del sector público y la búsqueda de actividades referentes y acontecimientos internacionales como la clave para proyectarse más hacia el exterior.
Un exterior que, por el contrario, empieza a ver el territorio español con lupa. ¿La causa? Gay de Liébana es claro y rotundo: "La tasa Google ha hecho que España ya esté marcada con rojo en la Casablanca". Opina que es un error, la clave está en ser "amigo" de americanos, japoneses y chinos, los amos de la economía mundial a estas alturas. La tasa, aprobada por el Gobierno de coalición hace unas semanas, evidencia, según el profesor, las carencias españolas porque "nosotros no somos nadie y con esta decisión crispamos al número 1 del mundo. Es un acto de miopía gubernamental de primer nivel porque el negocio que nosotros le suponemos a Amazon o Apple es nada para lo que tienen en el resto del mundo. No somos nadie", repite.
"La tasa Google es de una miopía gubernamental de primer nivel"
Puesto que habla de decisiones geopolíticas, y ¿el Gobierno qué? "A la empresa se la ha satanizado. El actual Gobierno está maltratándola. No hay ni uno en el Gobierno que haya trabajado en el mundo real, que es en el que a final de mes no tienes dinero, cuando no has podido pagar a los proveedores. Esto es trabajar en el mundo real", justifica el profesor. Su opinión se basa, además, en la idea de que "un país es lo que son sus empresas. Mira si no en los Estados Unidos, las primeras empresas del mundo son norteamericanas, por eso son los primeros".
Modelo productivo errado, la tasa Tobin y la tasa Google, una cifra de paro del 14%... la realidad es, para Gay de Liébana, que hay en el mundo de la empresa quien podría dirigir el Estado de una manera más adecuada. "Ponemos a Juan Roig, Amancio Ortega y a ClementeGonzález-Soler, el presidente de IFEMA,a dirigir. Otra cosa sería", apunta. De la política económica no tiene mejores palabras para usar, de hecho considera que la vicepresidenta Nadia Calviño es "el clon de Pedro Solbes", el ministro económico de la era Zapatero, "a pesar de que él todavía era peor".
En la conversación de una hora, larga cómo hemos dicho, el coronavirus, el Mobile World Congress de Barcelona y su cancelación están presentes: son la actualidad de hace unas semanas. Pero no es tan importante la decisión como lo que hay detrás, viene a decir el experto: "Trump está haciendo la guerra fría, le ha querido hacer el vacío a Huawei. Él ha apostado por Ericsson y Nokia, puesto que una parte grande de su negocio está centrada en las redes del 5G. Sí, esto que estamos viviendo ahora es la guerra fría convertida en guerra tecnológica".
Al acabar, Gay de Liébana promete que enviará su nuevo libro a la redacción. En VIA Empresa lo reseñaremos. Y todos ustedes lo podrán leer.