
VidaCaixa, el grupo asegurador de CaixaBank, continúa al alza. Entre enero y el septiembre obtuvo un beneficio neto consolidado de 945,8 millones de euros hasta septiembre, un 10,3% más que en el mismo periodo del año anterior. Según ha informado este viernes en un comunicado, el resultado se atribuye al crecimiento de los recursos gestionados, que han ascendido un 12% anual, hasta los 129.942 millones de euros en activos.
Por otro lado, los clientes han crecido un 5,7% respecto al mismo periodo de 2023, situándose en los 6,8 millones. Resaltan los planes de pensiones, que han registrado un total de 1.225 millones de euros, un 12,6% más. En cambio, los ingresos por pymes y aportaciones han caído un 3,7%, hasta los 9.808 millones de euros, de los cuales 7.434 millones han sido seguros de ahorro.
Durante los nueve primeros meses del 2024, VidaCaixa ha abonado 4.120 millones de euros en prestaciones al Estado y Portugal. Alrededor de la mitad han ido a parar a personas mayores de 65 años. En total, el grupo ha pagado prestaciones a más de 850.000 usuarios.
Un buen momento que se alarga en el tiempo
Estos resultados dan continuidad a la buena dinámica de la entidad últimamente. Cabe recordar que durante el 2023 se anotaron aumentos de las ganancias de hasta el 35% durante el periodo. En aquel momento, VidaCaixa lo atribuyó a "la buena evolución" de las carteras de negocio y el comportamiento alcista de los mercados.
Últimamente, la firma ha sido protagonista porque su exdirigente, Tomás Muniesa, ha sido escogido el próximo presidente no ejecutivo de CaixaBank. Durante 20 años, Muniesa estuvo al frente de la aseguradora y continúa ligado a la entidad como vicepresidente.