En teoría, desde julio del 2021 en Europa está prohibido vender pajitas, cubiertos y platos de plástico desechable. Aunque no todos los países llegaron a tiempo a la normativa, aprobada en 2019 y vigente desde el 2021. España, por ejemplo, es uno de los países que no adaptó a tiempo la legislación para limitar los plásticos desechables y atrasó la puesta en marcha de la normativa a enero del 2023.
Por el camino, el tejido empresarial ha ido dando sus propios pasos en la lucha contra el plástico. Encontramos grandes ejemplos en el sector de la alimentación y los supermercados, la hostelería, la hoteleria y el comercio al por menor. En la mayoría de los casos se está sustituyendo el plástico por otros materiales, como el papel, el cartón o las fibras naturales. Pero las fórmulas para conseguirlo son infinitas y, de la innovación y el diseño, ha surgido un producto que revoluciona el concepto de los cubiertos desechables: Voilà!
Laura Gispert y Ricardo Conde, cofundadores de Voilà Bio, han encontrado una alternativa a los cubiertos de plástico desechable "que no solo es 100% biodegradable sino que, además, mejora la experiencia gastronómica", explica Gispert. Son cubiertos comestibles y son el resultado del trabajo de final de grado de Elisava de Gispert, un proyecto que contó, desde buen inicio con la aportación del reconocido chef Xano Saguer, del Espaisucre. La filosofía de Gispert, y por lo tanto de Voilà, es que "la sostenibilidad no suponga un sacrificio, sino que aporte un valor añadido".
La empresa emergente, que forma parte de la red europea de inteligencia colectiva e innovación cruzada Netmentora, ha sido reconocida con el primer premio de Innofood 2020, iniciativa de Barcelona Activa y Mercabarna que galardona aquellas empresas innovadoras que mejoren cualquier parte de la cadena de valor del sector alimentario.
La comida está servida
Saguer trabajó con Gispert, sugiriendo diferentes ingredientes y maneras de trabajar el producto hasta conseguir la receta y fórmula definitiva: "escalable, apta para todo el mundo, sin gluten y capaz de alcanzar el mercado de cubiertos desechables del planeta", indica Gispert. Inicialmente, estaban formados por una mezcla de harina, pero después evolucionaron hacia un producto sin gluten, resistente -que no se deshiciera con diferentes temperaturas de la comida- y "que fuera suficiente duro para poder cortar y pinchar, pero a la vez se rompa al ser mordido".
Los cubiertos de Voilà son ecológicos, comestibles y biodegradables. Son veganos, sin gluten, saludables y nutritivos, y además tienen un diseño estudiado. Según Gispert, "al introducir una nueva funcionalidad en el cubierto, la de comerlo, el diseño tenía que acercarnos a la función del cubierto que conocemos de toda la vida". Por eso es sencillo, ergonómico y limpio. El diseño tiene méritos compartidos: los de Gispert y Pau Trulla, diseñador de producto y compañero de carrera.
Despegue internacional
Los cubiertos de Voilà tienen un sabor neutro: sirven para dulce y salado. La textura del cubierto en la boca "es agradable, a diferencia de la madera", indica Gispert. La cucharilla pequeña y el batidor de café son las referencias más sencillas y más demandadas, pero también tienen tenedores, cuchillos, cucharas grandes, palos para helados y están desarrollando nuevas gamas de productos, como pajitas.
Actualmente, fabrican el producto en unas instalaciones ubicadas al norte de España, pero están buscando más fabricantes para poder alcanzar los volúmenes previstos para los próximos ejercicios. Desde el lanzamiento de Voilà, a finales del 2021, han producido más de 300.000 cubiertos y la previsión de la empresa emergente catalana es alcanzar el medio millón anual para el 2022.
En los pocos meses de trayectoria, ya han trabajado con Vueling, Globo, diferentes cadenas de cafetería y franquicias internacionales de helados y yogures, haciendo pruebas piloto y pedidos a escala mundial. En el ámbito del helado, están desarrollando una gama de productos con diferentes empresas para introducir palos de helado comestibles a sus helados industriales. El proceso de validación del producto, pero, requiere un año de duración para comprobar que el palo no se echa a perder durante este periodo.
Además de Gispert y Conde, Voilà cuenta con un consejo de administración formado por tres socios provenientes de tres sectores diferentes: la industria alimentaria, ingeniería y sector financiero. Los tres son socios inversores. El proyecto no ha necesitado rondas de financiación y, de hecho, espera ir creciendo "de forma orgánica", afirma Gispert. Este año tienen previsto empezar a ampliar el equipo para las áreas de ventas y operaciones.