La nutrición materna previa a la concepción es una parte vital de la preparación para el embarazo. Esto afecta tanto a la fertilidad como las primeras etapas de la gestación. Las reservas insuficientes de energía pueden afectar negativamente a la ovulación, menstruación y desafiar el comienzo del embarazo. Por otro lado, los excesos de depósitos de grasa pueden inhibir la concepción afectando la ovulación a causa de la insensibilidad a la insulina y el exceso de hormonas sexuales masculinas, entre otros factores. En el caso del hombre, tanto el exceso de energía como una alimentación poco variada y desequilibrada pueden afectar a la calidad del esperma (fertilidad). Una dieta sana y equilibrada ayudará a que el organismo de la mujer se prepare para los cambios fisiológicos que estén por venir y a incrementar también las posibilidades de concebir.
Además de una dieta equilibrada, el estilo de vida que lleven la mujer y el hombre influirá en las posibilidades de éxito del embarazo. El estrés o la ansiedad, los hábitos de trabajo o de ocio, el dormir bien, o el ejercicio físico son aspectos que pueden repercutir de forma decisiva en la fertilidad de los dos.
Una dieta equilibrada y el estilo de vida que lleven la mujer y el hombre influirá en las posibilidades de éxito del embarazo
La mayoría de los estudios demuestran que hay una relación positiva entre determinados nutrientes y el efecto que tienen en el desarrollo de la descendencia. Entre ellos destacan el ácido fólico, los ácidos grasos omega-3, el zinc, el hierro, el calcio, el yodo y otras vitaminas del grupo B.
Es cierto que la mujer una vez conoce que está embarazada tiene la tendencia a tomar los suplementos que ya vienen preparados para cada uno de los trimestres del embarazo. Pero, ¿como podemos saber si estos suplementos serán bien aprovechados por el organismo de la mujer?
Hay un número elevado de mujeres que se quedan embarazadas y no son conscientes hasta pasadas las primeras semanas del primer trimestre, periodo en el cual ya se han dado lugar procesos esenciales del desarrollo fetal, de forma que la primera posible intervención ya sería tardía para eliminar determinados factores de riesgo como ciertas malformaciones del sistema nervioso debido al déficit de ácido fólico. De aquí recae la importancia de hacer una buena planificación, por ejemplo, tomando algún suplemento de ácido fólico varias semanas previas a la concepción. ¿Qué tipo de suplemento? ¿Ácido fólico o Folato?
Es importante hacer una buena planificación, tomando algún suplemento de ácido fólico varias semanas previas a la concepción
El ácido fólico es una de las vitaminas del grupo B más esenciales para el buen desarrollo fetal. Esta vitamina tiene varias formas químicas y cuando entra en el organismo, mediante determinados procesos, sufre una activación para que la vitamina pueda ser bien aprovechada (ruta de la metilación y enzima MTHFR). Hoy en día, la única manera que existe para conocer si nuestro organismo es capaz de activar correctamente esta vitamina (o cualquiera otro nutriente) es mediante un estudio genético. Esta información nos permite conocer la forma química y la dosis que tiene que tener el suplemento de ácido fólico (u otros nutrientes necesarios para el organismo).
En este artículo se pretende remarcar la importancia, no sólo de un buen asesoramiento dietético por parte de un nutricionista especializado, sino también el poder conocer como asimilamos los nutrientes, a través de un estudio genético, y cuál es la forma química que mejor se aprovecha en nuestro organismo para conocer la suplementació más óptima para lograr un buen estado nutricional previo a la concepción.