Del mismo modo que ya no hay puestos de trabajo que duren hasta la jubilación, ya no hay tampoco formación que sea suficiente para toda la vida laboral. En otras palabras, que tenemos que estar formándonos permanentemente para adaptarnos a los cambios de contexto. No es que nuestros estudios, conocimientos y experiencia no nos sirvan por siempre jamás, pero no nos permitirán desarrollarnos profesionalmente si no los vamos complementando, perfilando, adaptando y mejorando con nuevos estudios, conocimientos y experiencias.
El aprendizaje permanente es el que se lleva a cabo a lo largo de la vida con el objetivo de mejorar los conocimientos y aptitudes con una perspectiva laboral
Ahora bien, no estamos hablando sólo de hacer cursos reglados de actualización de los estudios que hicimos cuando éramos jóvenes o de cursos para hacer un cambio de orientación profesional, sino que el aprendizaje permanente es el que se lleva a cabo a lo largo de la vida con el objetivo de mejorar los conocimientos, las competencias y las aptitudes con una perspectiva laboral, pero también personal, cívica o social. Un aprendizaje sin fronteras, porque puede ser presencial o en linea; porque aprendes a los veinticinco años, a los cuarenta y a los cincuenta y ocho; porque el que aprendes porque te apetece personalmente (como por ejemplo, tocar el piano o hacer taitxí) beneficiará tus competencias profesionales, y al revés.
Por lo tanto, lanzaos de hacia el aprendizaje permanente de la terminología catalana! Dejáis para los angloparlants lo lifelong learning, para los francófonos el apprentissage continuo o el apprentissage permanente, para los italianoparlants el apprendimento permanente y para los hispanohablantes el aprendizaje continúo o el aprendizaje permanente.
Encontraréis esta información, y más, al Cercaterm.