En los últimos años asistimos al que podría llegar a ser un cambio en el paradigma del consumo. Despacio entre los elementos que valoramos de un producto, y que nos puede hacer decantar por este otro, es su relación con el medio ambiente. Con esto no nos referimos únicamente a que traiga lo etiqueta "eco" o "verde" enganchada al embalaje. Nos preocupamos de qué materiales se han usado por la fabricación, donde se ha fabricado y, en especial, si se puede reciclar. Esta última preocupación es de la que nace Coffee Out, una startup del ecosistema de BarcelonaActiva que ha desarrollado un aparato para reciclar al completo las cápsulas de café.
En Juan Estudillo, fundador de la startup, no es nuevo en el mundo de los negocios y menos del reciclaje. El año 2014 creó Sumics Parts, una empresa dedicada a proveer de artículos y recambios a los gestores de residuo. Su experiencia profesional y la pasión por el café de toda la familia Estudillo fueron los detonantes porque el empresario se lanzara a crear una segunda empresa.
El fundador estaba convencido que al ser un proceso farragós muchos usuarios acabarían para no reciclar las cápsulas y estaba en el cierto
La mejor opción: la sencillez
"Usamos mucho la cafetera de cápsulas a casa y nos dimos cuenta que reciclarlas era poco práctico porque se tiene que ir a la tienda o en su Punto Verde", recuerda Estudillo. El fundador estaba convencido que al ser un proceso pesado muchos usuarios acabarían para no reciclar las cápsulas y estaba en el cierto, puesto que según exponen en su web cada minuto se echan 13.500 cápsulas de café a la basura. De forma que empezó su investigación para desarrollar un producto con una máxima a la cabeza: la sencillez.
Quién tenga un vaciador de cápsulas de Coffee Out sólo tendrá que introducir la cápsula utilizada en el producto y presionar la parte superior de este. Dentro la cápsula se vaciará, dejándonos tirar a nuestra propia basura la cápsula de aluminio por un lado y el café por otra. Y es muy importante recalcar el hecho que la cápsula tendrá que ser de aluminio. "Con las cápsulas de plástico es casi imposible dejarlas completamente limpias", se lamenta el fundador y añade: "Además, el aluminio es un material que se puede reutilizar de forma casi infinita".
Esto no implica que no haya manera de reciclar el plástico y Coffee Out es un ejemplo, puesto que está fabricado con plástico reciclado. "El plástico no es malo como se cree, lo es si no se trata ni se recicla como es debido", remarca Estudillo. De este modo quiere ofrecer un producto coherente con la máxima del mismo, reciclar más y mejor.
El emprendedor explica que "nuestro principal objetivo son las grandes superficies que venden todo tipo de productos para el hogar"
Despacio hacia los hogares
Cómo ya es habitual nos encontramos ante una empresa que vio truncados sus planes por la crisis de la Covid-19. En el caso de Coffee Out se atrasó su producción. "Lo queríamos tener terminado de cara en junio, pero no pudo ser", recuerda Estudillo. Aún así, el fundador ha continuado adelante con su proyecto y esta semana estará terminada la primera tanda de Coffe Outs. Con un precio que se moverá sobre los nuevo euros.
"Nuestro principal objetivo son las grandes superficies que venden todo tipo de productos para el hogar", asegura Estudillo. No es el único objetivo que tiene claro, también sabe que primero quiere apostar por el mercado estatal y a largo plazo por el Europeo.