
14
de Noviembre
de
2014
Más allá de sus usos militares, que se remontan años atrás, desde hace unos meses los drones han empezado a popularizarse en el ámbito civil.
Empresas como Facebook o Amazon han anunciado planes de futuro para usar estos pequeños aparatos voladores no tripulados para traer Internet a zonas remotas o incluso para repartir mercancías. Más allá de la viabilidad de estas ideas, el cierto es que empresas de fotografía, de realización de vídeos e incluso particulares que disfrutan del placer de pilotar ya son clientes fieles de las principales marcas fabricantes de drones..
En cuanto a las funcionalidades y precios de los dispositivos, hay modelos muy básicos, como lo Parrot Ar.Drone, disponible por unos 300 euros y modelos más avanzados, como los Phantom, fabricados porlaempresa china DJI y disponibles a partir de unos 800 euros.
Ahora esta misma compañía, acaba de presentar su producto más avanzado, lo Inspiro One.
El dispositivo, con un precio de unos 2.250 €, dispone de las funcionalidades de los drones más potentes con una medida reducida y una facilidad de uso sorpresivo:
De entrada, igual que sus hermanos pequeños, lo Inspiro One se estabiliza automáticamente al aire haciendo uso de los sensores GPS. Por lo tanto, aunque sople viento o no seamos demasiado habilidosos con los controles, el aparato siempre permanecerá quieto y establo.
El despegue y aterrizaje se realizan con un solo toque del controlador y de manera totalmente automática. Además, el aparato dispone de un sistema de guiado que le permite aterrizar en un punto predefinido, o allá donde sea el mando a distancia si en algún momento pierde la señal o tiene problemas.
En cuanto al sistema de vídeo, lo Inspiro dispone de una cámara motorizada capaz de registrar películas a resolución 4K y disparar fotografías a 12 Megapíxels. El vídeo de la cámara se almacena directamente en una tarjeta microSD alojada en el interior del dron y se transmite en directo al mando a distancia, que dispone de una salida HDMI para poder emitirlo en directo.
La cámara, además, dispone de estabilizador de imagen y un rotor de 360 grados que le permiten hacer panorámicas absolutamente espectaculares.
Además, y para hacer la grabación de vídeo todavía más profesional, el sistema ofrece controles duales, de forma que el piloto del drone y el operador de la cámara pueden ser personas diferentes trabajando en tándem.
Empresas como Facebook o Amazon han anunciado planes de futuro para usar estos pequeños aparatos voladores no tripulados para traer Internet a zonas remotas o incluso para repartir mercancías. Más allá de la viabilidad de estas ideas, el cierto es que empresas de fotografía, de realización de vídeos e incluso particulares que disfrutan del placer de pilotar ya son clientes fieles de las principales marcas fabricantes de drones..
En cuanto a las funcionalidades y precios de los dispositivos, hay modelos muy básicos, como lo Parrot Ar.Drone, disponible por unos 300 euros y modelos más avanzados, como los Phantom, fabricados porlaempresa china DJI y disponibles a partir de unos 800 euros.
Ahora esta misma compañía, acaba de presentar su producto más avanzado, lo Inspiro One.
El dispositivo, con un precio de unos 2.250 €, dispone de las funcionalidades de los drones más potentes con una medida reducida y una facilidad de uso sorpresivo:
De entrada, igual que sus hermanos pequeños, lo Inspiro One se estabiliza automáticamente al aire haciendo uso de los sensores GPS. Por lo tanto, aunque sople viento o no seamos demasiado habilidosos con los controles, el aparato siempre permanecerá quieto y establo.
El despegue y aterrizaje se realizan con un solo toque del controlador y de manera totalmente automática. Además, el aparato dispone de un sistema de guiado que le permite aterrizar en un punto predefinido, o allá donde sea el mando a distancia si en algún momento pierde la señal o tiene problemas.
En cuanto al sistema de vídeo, lo Inspiro dispone de una cámara motorizada capaz de registrar películas a resolución 4K y disparar fotografías a 12 Megapíxels. El vídeo de la cámara se almacena directamente en una tarjeta microSD alojada en el interior del dron y se transmite en directo al mando a distancia, que dispone de una salida HDMI para poder emitirlo en directo.
La cámara, además, dispone de estabilizador de imagen y un rotor de 360 grados que le permiten hacer panorámicas absolutamente espectaculares.
Además, y para hacer la grabación de vídeo todavía más profesional, el sistema ofrece controles duales, de forma que el piloto del drone y el operador de la cámara pueden ser personas diferentes trabajando en tándem.