El casco inteligente de Engidi está a punto de salir al mercado en fase piloto. La startup, fundada el 2015, crea un wearable que se introduce en el casco de los operarios y envía datos en tiempo real por monitorar la seguridad de los trabajadores. Ahora bien, sin la tecnología del laboratorio TheThinx 5G Barcelona quizás su dispositivo todavía no habría sido probado y no estaría preparado para salir al mercado. Y es que el laboratorio "nos permite unos adelantos de tiempos para probar nuestros dispositivos que en una startup nos es muy útil", señala el director técnico de Engidi, Marc Mir.
Engidi es la primera startup que ha pasado por el laboratorio, pero ya ha habido un total de 15 empresas que se han interesado por la iniciativa, como es el caso de Panasonic, que ha probado sus soluciones de Gas Metering. Impulsado por 5G Barcelona y Telefónica, TheThinx 5G Barcelona tiene como objetivo convertir la capital catalana en uno de los hubs de innovación digital europeos en el ámbito del 5G y permitir a las startups, pymes y corporaciones experimentar y validar nuevos servicios y aplicaciones con esta nueva tecnología.
Es por eso que un mes y medio después de su inauguración oficial, el laboratorio ha abierto puertas este martes porque cualquier actor del ecosistema emprendedor pueda ver en primera persona las posibilidades que ofrece el espacio, ubicado en el Pier01 de Barcelona Tech City.
Tecnología para mejorar la seguridad al trabajo
Engidi ha empezado a testar su tecnología al laboratorio TheThinx desde este verano, cosa que le ha permitido avanzar muy rápidamente y validar su solución. "Este espacio nos abre las puertas en un mundo del 5G al cual no sería fácil acceder", explica Mir. Uno de las ventajas es la disminución del consumo de batería en los dispositivos que envían información, un aspecto que supondrá una revolución gracias a la nueva tecnología.
Mir, de Engidi: "El laboratorio TheThinx nos abre las puertas en un mundo del 5G al cual por una startup no sería fácil acceder"
Engidi nace cuando su cofundador y actual CCO, Ignacio Massana, se dio cuenta de la dificultad de saber cuántos trabajadores había en una obra en el sector de la construcción y el poco control de seguridad existente. Fue entonces cuando empezó a pensar en un dispositivo que mejorara la seguridad de los espacios de trabajo, pero en aquel momento la tecnología YATE no estaba suficientemente desarrollada.
Pero esto no fue impedimento porque Massana y el otro cofundador y CEO de Engidi, Gerard Fernández, salieran adelante con el proyecto. Desde la idea hasta el primer prototipo ha pasado un periodo de tiempo en el cual los emprendedores han validado el concepto con la industria para asegurar la viabilidad del proyecto y ver a nivel tecnológico como se podía desarrollar.
El wearable de Engidi se introduce en el casco de los trabajadores y monitora en tiempo real la situación del empleado. De este modo, ofrece información sobre la geolocalització de la persona, el uso del casco, los impactos o caídas que haya sufrido el operario, la altura a la cual se está trabajando y datos de humedad o temperatura que determina el estrés térmico. Además, permite notificar en forma de alarma situaciones peligrosas por el trabajador y pulsar un botón de rescate.
Ahora bien, el CTO de la startup alerta que "se tienen que tener en cuenta las implicaciones que tiene la monitorización en tiempo real. Se tienen que identificar los datos que realmente son relevantes y que se tienen que tratar con inmediatez y qué, en cambio, tienen un valor más estadístico y son más susceptibles de utilizar en el largo plazo". Y es que Engidi aplica métodos de Machine learning para extraer patrones de comportamiento y elaborar así estrategias de prevención laboral, cosa que los permitirá entrar también en un sector tan importante en la industria cómo es la insurtech.
Su dispositivo está enfocado a la industria en general, por el que puede cubrir un gran número de verticales como el sector ferroviario, el forestal, la construcción o la minería, entre otras. Es por eso que su mercado "son los 85 millones de trabajadores con uso obligado de casco de protección que se estiman en todo el mundo", señala Mir.
En estos momentos, la startup, que cuenta con un equipo de siete trabajadores, está implementando las primeras pruebas piloto a la industria. La intención es seguir así durante todo el 2019 para conseguir el feedback necesario y poder perfeccionar el dispositivo de cara a su comercialización el 2020, según explican desde la compañía a VÍA Emprendida.
Las tres T del hub tecnológico
"Porque una ciudad sea un hub tecnológico de referencia, tiene que tener tres T: tecnología, talento y tolerancia, y Barcelona lo conseguirá si conseguimos trabajar con la tecnología, potenciamos el talento y somos una ciudad tolerante". Así lo ha indicado el CCO del Barcelona Tech City, Ricard Castellet, a la hora de presentar los motivos de la necesidad de un laboratorio 5G en Barcelona. Y es que, según él, "son tecnologías que estamos convencidos que cambiarán el mundo".
Se estima que el 5G tendrá un impacto económico de 14,6 millones de euros el 2025
Con esta filosofía en mente, no es de extrañar que el Barcelona Tech City haya querido ser el espacio donde albergar toda esta nueva tecnología incipiente. Una tecnología que se prevé que el 2025 tenga un impacto económico en España de 14,6 millones de euros, según ha indicado el director de transformación digital de la Mobile World Capital, Tomeu Sabater.
Y es que su misión es que "todo el que pase de 5G al mundo se haga en Barcelona y no en ninguna otra ciudad", ha añadido Sabater. Actualmente, la tecnología se está trabajando en 27 proyectos pilotos conjuntamente con empresas como Seat, Telefónica, Acciona y el Hospital Clínico.
La tecnología 5G es ya a tocar y dará respuesta a muchas necesidades: tener más anchura de banda, más velocidad y transmisión de datos, un tiempo de respuesta de la red de milisegundos y multiplicar por mil el número de dispositivos conectados. En poco tiempo podremos incluso descargar una película de alta calidad al móvil en sólo cuatro segundos.