La potencia y simplicidad de uso de la busca de imágenes de Google siempre ha sido una arma de doble corte. Por un lado, sus usuarios disfrutan de la facilidad de encontrar fotografías a partir de una palabra y desar-las para hacer uso en trabajos, presentaciones y documentos de todo tipo. Por otro lado, autores, fotógrafos y editores de contenido se quejan que el gigante de las buscas facilita el "robo de imágenes" al incluir un botón en los propios resultados de busca –el famoso 'ver imagen'– que carga la fotografía original para que el usuario la pueda descargar.
Desde ayer mismo, Google ha introducido un pequeño cambio que, a pesar de parecer insignificante, puede tener un gran impacto: ha eliminado el botón 'ver imagen'. Esto no implica, pero, que ahora el gigante tecnológico impida a los usuarios acceder a la fotografía original, sino que simplemente los obliga a hacer más pasos.
De hecho en una piada, Google ha explicado que, a pesar de eliminar esta funcionalidad, todavía se puede usar el enlace para visitar el web de origen, desde donde los usuarios pueden ver la imagen en contexto y desar-la si hace falta.
Today we're launching some changes donde Google Images tono help connect users and useful websites. This will include removing the View Image button. The Visit button remains, sonido users can see images in the contexto of the webpages they're dónde. pic.twitter.com/n76kuj4iod
— Google SearchLiaison (@searchliaison) 15 de febrero de 2018
Así pues, por qué tanto de ruido si en el fondo no ha cambiado nada? Bien, el cierto es que no ha cambiado nada... y sí que lo ha hecho. La intención del buscador es frustrar los usuarios que descargan imágenes de manera masiva, obligándolos a visualizar las webs de origen en el cual, se supone, el responsable como mínimo puede obtener un beneficio de estas visitas extra mediante la publicidad –que, oh! Sorpresa! En muchos casos también es propiedad de la empresa norteamericana–.
De todos modos, el más curioso de todo es que la trampa para ahorrarse visitar el web es de lo más sencilla y, de momento, Google no ha hecho nada para intentar evitarlo: en los mismos resultados de busca, cuando hagamos clic en una imagen y esta se amplía, si en lugar de tocar ningún botón, hacemos clic con el botón derecho del ratón sobre la foto y seleccionamos la opción de 'abrir la imagen en una pestaña nueva' o 'ver imagen', dependiendo del navegador, accederemos al archivo original.
Esto no es todo, algunos usuarios habréis notado que ha desaparecido otro botón interesante: el de 'buscar por imagen', que permitía cargar una imagen de nuestro ordenador y buscar de iguales o similares. En cambio del mismo modo que en el caso anterior, la empresa de Mountain View sólo nos quiere complicar algo más la vida, pues si arrastramos una imagen sobre la barra de busca del navegador, la busca reversa de imágenes sigue funcionando.
El hecho que un pequeño cambio como este, aparentemente tanto fácil de esquivar, pueda dar la impresión deseado sobre millones y millones de personas, hace reflexionar mucho. De entrada, sobre como un pequeño cambio cosmético puede tener un impacto de millones de dólares en derechos de autor sobre varias industrias, y por otro lado, sobre como la mayoría de personas hacen un uso completamente automático de la tecnología, sin preguntarse qué hacer cuando las cosas cambian o dejan de funcionar.