Introducir inteligencia artificial en las aulas es innovación, pero los avances en enseñanza superior van más allá de la tecnología. La personalización de los programas educativos según cada alumno y la renovación de los estudios para adaptarlos a las necesidades de personal de las empresas son dos ejemplos más de innovación en las universidades.
La propia función de los centros educativos ha cambiado a lo largo de los años: "Antes ibas a la universidad para acceder a los conocimientos; ahora, por las herramientas de formación que te ofrecen". Lo dice Xavier Marcet, presidente del Patronato Gestor del Euncet (escuela de negocios adscrita a la Universitat Politècnica de Catalunya) y experto en estrategia e innovación.
Precisamente la UPC es la segunda universidad más innovadora del Estado español, sólo superada por la Universitat de Barcelona (UB), según un informe de Reuters. El estudio tiene en cuenta las patentes registradas por las universidades en factores vinculados con el desarrollo de software, farmacia, dispositivos médicos o telecomunicaciones, entre otros muchos
Formatos ágiles
Centrarse en las necesidades de los usuarios es clave en la era de la personalización, que ha llegado a todos los sectores y también al educativo. Marcet cree que es básico para el futuro de las escuelas de negocio optar por formatos ágiles, tanto en temarios como en la forma de impartirlos. Pero también tienen que cambiar las competencias que se enseñan: "Las escuelas tienen que potenciar los perfiles singulares de las personas, tienen que transferir competencias individuales", añade.
Este es precisamente uno de los objetivos del Euncet y, para hacerlo, es necesario que las herramientas sean accesibles y los contenidos, personalizados. "La tecnología juega un papel esencial en este punto, puesto que se tienen que crear plataformas con contenidos interesantes para la gente que se forme", dice Marcet. Los formatos que triunfan actualmente son online o híbridos (semipresenciales).
El presente y futuro de la educación superior se encuentra en los MOOC (massive open online courses, cursos gratuitos en línea y sin límite de participantes, en su traducción del inglés). Este formato está en "revolución permanente" y en países como Estados Unidos gana cada vez más importancia.
Nuevas profesiones
Adaptar la oferta de estudios a la demanda que tienen las empresas es otro de los retos en innovación al cual se enfrentan actualmente las universidades. El objetivo es reducir al máximo el salto que hay entre las competencias que adquieren los alumnos y las habilidades que requieren las nuevas profesiones que se han introducido en el mercado laboral.
El marketing digital es una de las tendencias más claras. En Euncet, por ejemplo, cuentan con un grado en Marketing y Comunicación Digital, que aspira a formar a los profesionales que liderarán la transformación digital de las compañías y que dirigirán las estrategias de marketing en las empresas emergentes en el nuevo contexto económico.