El confinamiento domiciliario de la pandemia comportó que la virtualidad tuviera un protagonismo central en las vidas de las personas, una condición que, a pesar de que en menor grado, actualmente todavía se mantiene con muchas escenas cotidianas. En medio de esta oleada de cambios acelerados aparece Jotavirtual, una startup que intenta hacerse un hueco en el mercado con la virtualización de espacios para generar experiencias interactivas. "El Covid fue el punto de inflexión para ponernos a desarrollar esta idea que ya hacía mucho tiempo que trabajábamos", explica Emma Urbina, cofundadora del proyecto, durante una conversación con VIA Empresa.
A pesar de que el sector inmobiliario es uno de los principales mercados de Jotavirtual, los inicios de esta aventura empresarial fueron ligados a la educación, principalmente con programas destinados a centros educativos de Barcelona y su área metropolitana como son el Institut-Escola Sicília (Barcelona), el Col·legi Claret (Barcelona) o el Col·legi Singuerlín (Santa Coloma de Gramenet. "Nuestro rodaje era crear aulas virtuales con el objetivo que las escuelas pudieran continuar sus clases, pese a las circunstancias del momento", describe Urbina.
Con el uso de la tecnología virtual, una agencia inmobiliaria puede incrementar un 14% sus ventas
Una vez superada la fase más crítica de la pandemia, el equipo gestor de Jotavirtual trasladó su experiencia de las aulas al interior de las casas. Según cálculos internos de la empresa, con el uso de la tecnología virtual, una agencia inmobiliaria puede incrementar un 14% sus ventas y reduce a la mitad los desplazamientos para llevar a cabo las visitas. En este sentido, Habitat Immobiliària añade que el 80% de los compradores de viviendas inician el proceso en internet y los portales web que ofrecen la opción de una visita virtual captan un 50% más de usuarios que quién da la espalda a la tecnología. "No queremos sustituir nada, sino filtrar y optimizar el tiempo", expresa Urbina. La emprendedora no se muestra muy partidaria de autodefinirse como desarrolladora "sino implementadora".
El software de Jotavirtual, con la apariencia de un vídeo interactivo, permite al usuario hacer un recorrido por todas las habitaciones y espacios de una vivienda u otra zona, así como conocer la iluminación exterior o los equipamientos más próximos: restaurantes, tiendas, paradas de transporte público o zonas turísticas. Proyectos con imágenes de alta definición y compatibles con todas las herramientas de Google, hecho que contribuye a un mejor posicionamiento del cliente en la red.
Sin dejar el ámbito sectorial, un informe de la firma GetApp sitúa en un 63% el porcentaje de usuarios que utilizan la realidad aumentada como complemento de la visita física de un inmueble. Un dato para tomar como referencia de un mayor interés por el uso de la tecnología es que un 47% de las personas que visitan un hogar, con algún tipo de formato virtual, lo hacen con sus propias herramientas, sean gafas o tablets. El siguiente paso empresarial es lograr una posición de privilegio en el real estate premium, dentro y fuera de Catalunya.
El reto de la logística
En paralelo al sector inmobiliario, Jotavirtual no ha desatendido otras vías de negocio como la logística. "Se trata de un campo donde la simulación de las operaciones y el análisis previo juega un papel trascendental", expone Emma Urbina. Bajo el cobijo de una incubadora del Consorci de la Zona Franca de Barcelona, la tecnología 3D de la empresa emergente ayuda a reducir la duración de las operaciones de carga y descarga en los almacenes o mejorar las rutas internas del personal.
A través de la Incubadora Logística 4.0 y con la colaboración de la Fundación Incyde, durante el año 2023, el organismo presidido por Pere Navarro asesoró 29 startups que, a la vez, han levantado 13,6 millones de euros. "Somos una fábrica de oportunidades y los resultados de la Incubadora refuerzan el trabajo que se está realizando para impulsar un hub logístico en Barcelona abierto a la innovación, la digitalización y la sostenibilidad", manifiesta el delegado del Estado en el Consorci. Con proyectos de las características de la incubadora, el Consorci de la Zona Franca busca que todas las iniciativas emergentes implicadas mejoren la versatilidad de los procesos productivos, desarrollen talento especializado, diversifiquen su actividad y promocionen la internacionalización.