"A la cocina se innova con la revolución humanista" aseguraba el chef y empresario Joan Roca en una entrevista a VÍA Emprendida. Este golpe ha sido el turno de su hermano y sommelier Josep Roca que ha aprovechado el encuentro anual de la Fundación Factor Humano celebrada al TNC ante una sexagésima de directivos para reivindicar que "a veces, facturar menos te puede hacer sentir mejor. Me gusta pensar que andamos hacia un mundo donde se valoran los intangibles de las empresas".
Trato humano, innovación, pragmatismo y visión global son sólo algunos de los principios y valores por los cuales la Bodega de Can Roca recibió el premio Factor Humano Mercè Sala durante el pasado mes de mayo. Uno de los miembros del jurado y ganador de la anterior edición, Toni Espinal, ha recordado que "a la Bodega todo tiene un sentido, nada es superfluo. Apuestan para hacer una revolución humanista desde la humildad. En un sector donde todo es muy competitivo, no le falta el trato humano". "El proyecto tiene magia, la magia del placer culinario y la de comunicar los valores", ha añadido.
Roca: "La vida va mucho más allá de los títulos y de los diplomas, cuando hagamos la selección de personal nos interesamos por: si tienes hermanos grandes o pequeños, si tienes mascotas, qué ha sido tu día más feliz o el peor trabajando en un restaurante"
Roca no ha tardado a hacer las delicias del público con su particular visión de la revolución humanista: "La vida va mucho más allá de los títulos y de los diplomas, cuando hagamos la selección de personal nos interesamos por parámetros poco convencionales: si tienes hermanos grandes o pequeños, si tienes mascotas, qué ha sido tu día más feliz trabajando en un restaurante o, por el contrario, el peor momento que has vivido en una empresa... En una sociedad que va hiperaccelerada, queremos tener la oportunidad de ofrecer una mirada diferente".
Su mirada diferente los ha traído a ser escogidos hasta dos golpes como mejor restaurando del mundo. La clave de su éxito, aseguran, son las personas: "Estamos dentro de la revolución humana: preguntar el que sientes, más que el que cruces. Hemos tenido la suerte de ser dos veces el número 1, y con estos rankings tedas cuenta de la banalidad del éxito. El éxito 'engatusa' y crea inmovilismo creativo".
Más concretamente, el hermano grande de Roca explicaba a VÍA Emprendida que la Bodega fue el primer restaurante del mundo a tener una psicóloga especialista en gestión emocional cómo esInma Puig. El sector de la hostelería es conocido porque requiere de muchas horas de trabajo. Pero, dentro de La Bodega apuestan porque sus trabajadores compaginen la vida laboral y personal. A diferencia otros, han ampliado la plantilla y ofrecen dos turnos diarios de trabajo. Además, cierran expresamente los martes a mediodía para escuchar las personas colaboradoras y formarlas.
Durante su discurso, Roca también ha querido reivindicar la figura del camarero. "Los camareros somos vendedores de felicidad. Es fantástico porque puedes conseguir que una persona, sólo con un café, salga peor o mejor del que ha entrado". Así mismo, ha apuntado que "hemos tenido la suerte de hacer de nuestra pasión nuestra profesión".
Por su parte, el economista y periodista Jordi Goula ha recordado la primera vez que fue a la Bodega: "eran en ochenta y dos personas importantes de Girona me dijeron que me traerían a un lugar donde me lamería los dedos. Estábamos en una mesita pequeña, y el que comimos fue espectacular. Entonces, tuvimos claro que llegarían muy arriba". Por él, el éxito del negocio recae en cuatro pilares fundamentales: "la humildad, la responsabilidad, la ética y la autenticidad".
Durante el turno de preguntas también se han tratado temas como el papel de las mujeres a La Bodega de Can Roca, la presión que supone ser uno de los mejores restaurantes del mundo o qué son los objetivos que tienen de cara a un futuro próximo. "A Can Roca, las mujeres son imprescindibles. Hay un gran esfuerzo de comprensión, acompañamiento y sacrificio. Parte del mérito es de ellas, que trabajan y no siempre salen a las fotos. Pero las sentimos importantes en el éxito de hoy", ha añadido uno de los mejores sommeliers del mundo.
Roca: "Los camareros somos vendedores de felicidad. Es fantástico porque puedes conseguir que una persona, sólo con un café, salga peor o mejor del que ha entrado"
Entre los planes de futuro más inmediato, Roca también ha augurado la idea es abrir una o dos heladerías por año así como inaugurar un pequeño hotel en el centro de Girona. "Nosotros cada día jugamos la final de la Champions. Agotados? Es intenso pero lo vivimos, sólo sabemos hacer esto,hemos puesto la vida y sabemos que un contacto con la otra persona es una oportunidad para darle felicidad", ha concluido el homenajeado. Del fútbol a la cocina y viceversa.
La Fundación Factor Humano también ha querido hacerse suya la innovación y por primera vez no sólo ha invitado los directores generales de las empresas asociadas sino también sus responsables de Recursos Humanos. Según la Fundación liderada por Juliana Vilert y Anna Fornés, el objetivo del cambio es "crear un espacio de conversación transversal para aumentar la capacidad de influencia de la función de personas y, a la vez, promover organizaciones con un liderazgo más humano y ético".
Entre las 67 organizaciones asistentes, no se lo han perdido: el Ayuntamiento del Hospitalet, Cellnex, Fundación DKV Integralia, Everis, FGC, Fundación Bancaria "la Caixa", Generalitat de Catalunya, Hospital San Juan de Dios de Barcelona, MC Mutual, Moventia, Savia, Sudara Cooperativa, Universitat Oberta de Catalunya o Universitat Pompeu Fabra, entre otros.