Teletrabajo, clases de gimnasio a distancia, conciertos en directo a través de Instagram... y también visitas virtuales a museos. La crisis sanitaria de la Covid-19 ha impulsado nuevas formas de seguir con nuestra vida cotidiana con la máxima normalidad posible a pesar del confinamiento. Y todo esto gracias a la tecnología, que ha surgido como la gran aliada en tiempos de coronavirus. Los museos y las instituciones culturales ya hace unos años que abordan su transformación digital, pero la Covid-19 ha hecho que esta digitalización sea más necesaria que nunca. El objetivo? Abrir nuevas vías de experimentar la cultura y hacerla accesible a todo el mundo.
"Los museos siempre han sido instituciones muy vivas y han sabido adaptarse a un público no solamente físico sino también digital", señala Marta García-Muñoz, responsable de contenidos y comunicación de GVAM, una empresa que ofrece soluciones para la digitalización y creación de contenidos interactivos para museos, monumentos e instituciones culturales. De hecho, la mayoría de las instituciones culturales ya hablan de usuarios más que de visitantes, porque "ya no conciben la visita como la única relación entre el museo y el visitante".
Audioguías vs. nuevas herramientas digitales
Según García-Muñoz, "el hecho que muchos museos cuenten actualmente con visitas virtuales y un plan de comunicación online muy sólido ha permitido que se hayan adaptado muy bien a la situación actual de confinamiento, tanto grandes instituciones como museos más pequeños". La empresa, que realiza guías interactivas para la visita a museos y monumentos que sustituyen las audioguías tradicionales, se encuentra estos días trabajando con muchas instituciones culturales para traspasar todos sus contenidos a las páginas web y así facilitar el acceso gratuito a todas las personas durante la cuarentena. Es el caso de varios museos estatales como el Museo Arqueológico Nacional, el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, el Museo Nacional de Altamira, el Museo Sefardí de Toledo y el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida, que están migrando sus contenidos a la web para hacerlo accesible a todo el mundo desde casa. O la Catedral de Santiago de Compostela, que ha puesto de forma gratuita el acceso a su app.
García-Muñoz: "El hecho que muchos museos cuenten con visitas virtuales y un plan de comunicación online sólido ha permitido que se hayan adaptado muy bien a la situación actual de confinamiento"
Ahora bien, para Montse Gumà, jefa del departamento de medios digitales del MNAC – Museu Nacional d'Art de Catalunya, "las apps estuvieron muy moda hace un tiempo y todos los museos tenían una propia, pero en el momento en el cual las páginas web empezaron a tener su versión móvil, las aplicaciones cayeron en desgracia". Es por eso que el MNAC cuenta con una app propia pero en la que ponen contenido diferente del de su web, como recorridos por las obras de la colección a través de diferentes itinerarios. "Con la aplicación, podemos poner obras de altísima resolución y, a través de un relato textual, permite al usuario acercarse a detalles de las obras que a simple vista no los ves, te los tienen que enseñar", explica Gumà. Sin embargo, Gumà pone sobre la mesa el debate de audioguías vs. apps y nuevas herramientas digitales: "Se tiene que evaluar realmente cuál es la mejor opción para la visita guiada en los museos, en función de cuáles son las necesidades de los usuarios. Las audioguías cada vez son más multimedia y el gran reto que tenemos con la app es que el usuario no la desinstale una vez sale del museo, sino que la tenga siempre en el bolsillo".
Aparte de la app, uno de los ejes del plan estratégico del museo desde hace unos años es la digitalización de sus colecciones para ponerlas al alcance de todo el mundo. Actualmente cuentan con unas 20.000 piezas publicadas en su catálogo online y su intención es acabar el año con unas 40.000. El siguiente reto es la digitalización de documentos para añadirlos a las bibliotecas online pero, de momento, todavía es una asignatura pendiente para el MNAC. "Somos instituciones públicas y nos debemos a los ciudadanos y por eso tenemos que ir hacia el acceso abierto de todo el contenido", afirma Gumà.
Tecnología que transformará los museos: 3D, realidad aumentada y virtual
Visitas virtuales, 3D, realidad aumentada, realidad virtual... La tecnología para una experiencia más digital en los museos y monumentos existe, pero su aplicación todavía se encuentra en un punto muy incipiente. "Mucha gente conoce lo que es la realidad virtual porque es una tecnología que despierta mucho interés, pero su aplicación todavía es muy incipiente y museos que tengan una estructura permanente de realidad virtual son muy pocos", señala Andreu Florit, cofundador de la startup REM Experience.
Para Florit, la introducción de la tecnología en los museos es un proceso que está avanzando despacio y de forma progresiva. Primero se ha empezado con la introducción de la visita virtual, que permite ver el interior de un museo desde el ordenador. Y a partir de aquí se puede ir avanzando con tecnologías que permiten no sólo ver, sino interactuar con el entorno. Es el caso de la realidad aumentada, que permite hacer clic encima una pieza de un museo, por ejemplo, y que aparezca un vídeo con más información. O la realidad virtual, que ofrece una experiencia inmersiva y trasladarse a otro contexto.
Gumà: "El MNAC es una institución pública y nos debemos a los ciudadanos, y por eso tenemos que ir hacia el acceso abierto de todo el contenido"
Muchas tecnologías pero que se irán introduciendo despacio. El siguiente paso? Tanto García-Muñoz cómo Florit coinciden que será la realidad aumentada, puesto que "es más fácil que llegue a toda la población porque sólo necesitas un móvil, no te tienes que comprar unas gafas de realidad virtual", afirma Florit. "La realidad virtual cogerá fuerza cuando las gafas sean más económicas y accesibles a todo el mundo. De momento esta tecnología se está utilizando en proyectos concretos o en pequeñas partes de la exposición de los museos", añade.
Es el caso del MNAC y la Fundació Tàpies, que en un momento dado hicieron uso de la realidad virtual y aumentada para acercar las dos exposiciones virtualmente a sus usuarios. "De este modo, si visitaban una, podían ver también la otra", apunta Gumà. Además, la institución está trabajando con la Generalitat en un proyecto de 3D que permitirá ver la obra por todos los ángulos posibles, ayudando al usuario a acercarse más al arte y ver las piezas de una manera más completa. "Tenemos que ir introduciendo la tecnología para una experiencia más digital pero siempre con un motivo detrás: primero es el contenido y después la tecnología", añade.
El futuro de los museos
"El futuro del sector es no distinguir entre las barreras físicas del museo o monumento, puesto que las instituciones culturales son mucho más, son comunidades digitales y de intercambio", afirma García-Muñoz. Es por eso que los museos van hacia una mayor interacción de los usuarios que los visitan, que puedan disfrutar de la cultura a la vez que expresan su opinión o juegan con la gamificación.
Para Florit, "de aquí a 10 o 15 años la tecnología ganará mucha más fuerza porque ofrece una nueva forma de experimentar la cultura y la historia desde un punto de vista mucho más atractivo gracias a la interacción". Quién sabe, puede que lleguemos a adentrarnos en la casa de Dalí y conversar con él cómo si viviéramos en su época.