La vida se nos ha parado en muchos ámbitos, trabajo, ocio y, desgraciadamente, el formativo no es una excepción. A diferencia otras actividades más preparadas para sumar el prefijo "tele" en su nombre, la educación no lo tiene tan sencillo. La brecha digital entre centros formativos desde primaria hasta la educación superior es muy dispar. La realidad material de muchos centros educativos que conforman la red formativa de nuestro país los ha conducido a encontrarse sin recursos ni experiencia suficiente. Por eso Classlife, una startup consolidada de educación telemática, quiere ayudar y avanza una plataforma de interacción gratuita entre profesores y alumado en su app durante el confinamiento por el coronavirus.
Classlife, es una plataforma que conecta todas las áreas que interfieren en el funcionamiento de una escuela, desde administración o ventas hasta el campus virtual. "Es un espacio en qué toda la comunidad educativa del centro se puede comunicar", remarca Mario Espósito, fundador de la startup. El coste del servicio lo asumen los centros, que pagan unas licencias de uso.
"Queríamos democratizar el acceso el 'e-learning' por aquellas personas que su escuela no tiene o no puede adquirir estos servicios"
La compañía que nació entre el 2015 y el 2016 ha ido creciendo y ofreciendo más variedad en sus servicios. Entre las novedades que se acercaban estaba un nuevo espacio llamado Classlife Rooms, destinado a crear aulas virtuales que se conviertan en una extensión de la comunicación únicamente entre profesor y alumnos. Es decir, en esta extensión gratuita de la aplicación sólo interaccionan el docente y el alumnado. "Queríamos democratizar el acceso al e-learning por aquellas personas que su escuela no tiene o no puede adquirir estos servicios", asegura Espósito. A raíz de la crisis sanitaria por el coronavirus en la que nos encontramos inmersos la compañía ha acelerado el lanzamiento de este servicio.
Pasión por la educación
Mario Espósito tiene un largo recorrido y dedicación al mundo de la educación. El fundador de Classlife fue profesor a institutos y en la Universidad de Rafael Andibar y también acumula experiencia en el diseño web. Este segundo ámbito fue el que me empujó a cursar un máster a ESADE donde salió adelante Classlife como Trabajo de Final de Máster. "Hice el máster porque ya sabía que quería crear Classlife, era un proyecto que hacía tiempo que me vagaba por la cabeza", recuerda Espósito.
El máster lo ayudó a enfocar su proyecto y pudo adquirir experiencia en áreas fundamentales del sistema educativo con las que no había estado en contacto antes, por ejemplo, el área administrativa. También introdujo formatos que ya eran exitosos en otras plataformas, como un muro como Facebook. "Todas estas experiencias que habían funcionado en otras plataformas las queríamos importar a la nuestra para maximizar su uso", explica el CEO y fundador. De este modo Classlife se convierte en una herramienta intuitiva de usar.
La empresa ha cerrado el 2019 proporcionando servicio cerca de 50 centros educativos y 50.000 alumnos
Decidido a apostar por este proyecto y consciente que el mismo le exigiría toda su concentración el enero de 2016 Espósito lo deja todo para dedicarse a Classlife. La apuesta del emprendedor fue un éxito. El 2017 salen al mercado y empiezan a trabajar con 14 centros, los cuales crecen hasta 32 el año siguiente. La empresa ha cerrado el 2019 proporcionando servicio cerca de 50 centros educativos y 50.000 alumnos. Todo ello les ha reportado unos beneficios de 250.000 euros el año pasado y los permite emplear a nueve personas.
A todos los frentes
"Para empezar nos hemos movido por centro de Formación Profesional, Bachillerato y Educación Superior", remarca Espósito, quien expresa su interés para entrar en la esfera de la educación primaria y secundaria durante este 2020. Este es uno de los principales objetivos de la compañía, tener incidencia en todos los frentes que conforman nuestro sistema de educación.
Su expansión no se quiere limitar sólo a los diversos tipos de centros educativos que hay sino también a ser presentes en todo el territorio. Actualmente, su servicio ha penetrado especialmente en Madrid y Catalunya pero quieren extenderse por centros de todo el Estado.