La tecnología 5G está a la orden del día, sobre todo desde que en la pasada edición del Mobile World Congress de Barcelona esta fuera uno de los protagonistas. El horizonte de la encendida de esta tecnología en Europa es el 2020, pero la multitud de cambios en el aspectre radioeléctrico, de legislación y de infraestructura para que funcione hace que la implantación del 5G a la Sido sea todo un reto.
Qué es el 5G?
Una innovación que tiene que permitir tres grandes mejoras:
- Aumento de la velocidad de conexión: se prevé que el 5G pueda ofrecer velocidades de conexión cien veces más rápidas que las actuales, hecho que permitirá la bajada de datos (películas, música, reproducción en tiempo real, documentos) a una velocidad mucho más elevada.
- Reducción de la latencia: el tiempo con que se envía un paquete de datos por internet y se recibe la respuesta se reducirá drásticamente, puesto que llegará a ser de tan sólo un milisegundo. Esto permitirá llevar a cabo operaciones telemáticas prácticamente en tiempo real, hecho que puede favorecer la conducción de vehículos o las intervenciones quirúrgicas a distancia.
- Más dispositivos conectados a la vez: el 5G, además, tiene que facilitar que cada vez haya más usuarios y objetos conectados en la red al mismo tiempo, sin interrupciones de señal y a una velocidad elevada. Así, teléfonos, electrodomésticos, vehículos, relojes, semáforos, etc. podrán estar conectados y transmitir datos constantemente.
"El nuevo escenario es la internet de las cosas: todos los aparatos conectados en la red tanto en casa como en la calle", explica el director del máster universitario de Desarrollo de Aplicaciones para Dispositivos Móviles de la UOC, Carles Garrigues. "Para cubrir esta demanda necesitamos la evolución hacia la quinta generación", añade. Aún así, todavía hay varios pasos pendientes para que España pueda acoger esta tecnología como se hace al resto de países.
Mover los canales de la TDT
El 2020 es el año cuando se prevé encender el 5G, momento en que la tecnología empezará a funcionar para dar servicio real a los usuarios. Este también será el momento en el cual la TDT se tendrá que mover fuera de los 700 MHz para dejar espacio para el 5G, que necesita mucha anchura de banda para funcionar. Así, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital tendrá que afrontar una nueva reforma del espacio radioeléctrico y las operadoras tendrán que invertir para renovar sus canales.
El 2020 es el año cuando se prevé encender el 5G
"Durante la primera mitad del 2018 tendríamos que ver la licitación de licencias de uso del espectro radioeléctrico", explica Garrigues, que añade que es posible que las primeras licencias se den para bandas entre los 1,5 y 3,6 GHz, "y más adelante habrá que licitar también la banda de los 700 MHz".
Definir el estándar del 5G
Hasta ahora, las compañías que han desarrollado esta tecnología lo han hecho con sus propios criterios y sin un estándar consensuado. "Para finales del 2018 está prevista la publicación de la estándar 5G Standalone, que definirá cómo es una red con tecnología totalmente 5G", explica Garrigues, que considera que operadoras y entes reguladores se tendrían que poner de acuerdo durante este primer tramo de año para cumplir con los plazos.
Garrigues: "Para finales del 2018 está prevista la publicación de la estándar 5G Standalone, que definirá cómo es una red con tecnología totalmente 5G"
Invertir en infraestructura
Durante el 2019 está previsto el despliegue masivo de infraestructura 5G. Esto quiere decir que las operadoras tendrán que hacer la inversión más fuerte que se requiere para poder dar cobertura a buena parte del territorio: renovación y colocación de antenas, definición de los servicios que ofrecerán con el 5G, políticas comerciales, etc. Las operadoras y las administraciones se tendrán que volver a poner de acuerdo para pactar como se hará esta inversión, qué costes asumirá cada cual y qué serán los plazos de ejecución.
Consolidar las pruebas piloto
Finalmente, para sacar provecho de esta nueva red, las administraciones públicas "tienen que dar un paso más y consolidar las diversas pruebas piloto que hemos ido viendo en nuestras ciudades en orden a desarrollar ciudades más inteligentes", explica Garrigues. La gestión de la movilidad, el alumbrado público, la seguridad ciudadana y los recursos hídricos son aspectos que se podrán "desarrollar masivamente gracias a esta red 5G, pero los ayuntamientos han ido poco más allá de proyectos iniciales y pruebas sin mucha continuidad", afirma el experto.