Detrás las tecnologías que buscan mejorar los procesos de atención y tratamiento sanitario hay un nicho de mercado todavía sin explorar. Esta oportunidad de negocio ha sido el tema de la jornada Las dos caras de las nuevas tecnologías en la salud. E-Terapia & Nuevas adicciones, organizada por el centro de psicología y psiquiatría infantil Orum Center celebrada recientemente en la Universitat de Lleida. "Ante la dispersión geográfica que presenta la demarcación de Lleida , las nuevas tecnologías pueden favorecer nuestra tarea", explica Francesc Xavier Amat, ninguno del área de psicología de Orum Center.
Además de los peligros evidentes por el abuso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), la jornada ha servido para debatir y analizar como estas pueden mejorar "la estructura laboral y los procesos de atención y los tratamientos médicos y sociales", tal como ha asegurado Ivan Alsina, psicólogo y especialista en el uso y la aplicación de las TIC en psicología, salud mental y educación. Además del control y seguimiento que permiten las nuevas tecnologías, Alsina añade que "el acceso a sistemas como la realidad virtual o la realidad aumentada para las empresas resulta fácil y económico".
Menos móviles en las escuelas
Un 21% de los adolescentes del Estado español sufre la adicción a las redes sociales. Esta cifra es el porcentaje más alto de los países de la Unión Europea. Los datos le sirven a Marc Masip, psicólogo y director del programa psico-educativo Desconect@, orientado a fomentar la desconexión del mundo digital, a reclamar la prohibición de los móviles a las escuelas. "Es una cuestión de hábitos. Igual que ahora siempre vamos con el casco cuando circulamos en moto y no fuman en los espacios cerrados, se tiene que crear esta conciencia".
Un 21% de los adolescentes del Estado español sufre la adicción a las redes sociales
La prohibición, según Masip, tendría que servir porque las administraciones creen una normativa para regular el uso de dispositivos como el teléfono móvil.
De momento, la nomofòbia (el miedo irracional a no estar con el aparato) que afecta un 77% de los usuarios "provoca accidentes de tráfico, incomunicación y supone una amenaza por el rendimiento laboral", avisa Masip.
Vacíos para legislar sobre las nuevas tecnologías
Como consecuencia del auge de las nuevas tecnologías, se ha detectado una dificultad para legislar sobre su uso. En este sentido, el responsable del programa de nuevas tecnologías del Hospital de San Juan de Dios, Àlex Palau, enumera acciones como el envío de imágenes de contenido sexual o el acoso como las prácticas que más riesgo comportan. "Son herramientas muy potentes que en manso de los adolescentes son peligrosas y tienen un riesgo alto de adicción".
Amat, responsable de Orum Center, insiste en la necesidad de establecer un marco jurídico para poder actuar en los tratamientos para mejorar la salud psicológica sin topar con limitaciones normativas. Entre estos dos conceptos basculó la jornada: advertir de los peligros de un uso excesivo de las nuevas tecnologías, al mismo tiempo que se presentaban herramientas para optimizar el uso de las TIC en el ámbito laboral y psicológico. Son las dos caras de la tecnología.