
22
de Marzo
de
2016
Act.
22
de Marzo
de
2016
"Tienen dos opciones: sentir la revolución tecnológica o no hacerlo. Cuando el viento los sople fuerte, levanten el vuelo como los cometas y vuelen alto. Este viento son las dificultades". No es el texto de una obra de teatro, es el final del discurso que el consultor Marc Vidal (@marcvidal) ha utilizado para cerrar la conferencia sobre transformación digital durante la celebración del 20è Foro Asessors Wolters Kluwer en Barcelona. La música de gran relato cinematográfico y la imagen de un cometa elevado que se proyecta en la pantalla son la atrezo que hace más efectivo el discurso casi épico de Vidal sobre cómo nos está afectando hoy en día la tecnología y, sobre todo, sobre cómo nos afectará en un futuro inmediato.
Inmediato, próximo, urgente... la rapidez con la cual llegan los cambios no esperará nadie, viene a decir Vidal. "Venimos de un Internet técnico (1993) vinculado a quienes controlaban Internet; después llegó la Internet empresarial (2001), la Internet social (2008) y después la Internet automático (2013) donde se producen procesos que se reenvian y auto-recortan sólo. Y llegará la Internet de las Cosas el 2018, cuando todos los objetos estarán conectados en el high frequency knowledge", pronostica el también emprendedor.
Él ya ha vivido algunas experiencias, como cuando sentado en la terraza de un hotel de Barcelona, un drone –"que no tenía permiso para sobrevolar el espacio aéreo", matiza- le trajo el abridor necesario para probar la botella de vino que sentaba encima su mesa. También ha subido en uno de los seis coches autopilotats que circulan, bajo autorización gubernamental, por las calles de la ciudad de Londres. "Tengamos cura con la exponencialitat de nuestra evolución como especie", avisa con cierto tono paternalista que no sorprende cuando, durante la ponencia, enumera con imágenes ejemplos de como la vida ya no es la que era gracias (o por culpa) de la tecnología.
Ejemplos del cambio tecnológico
Desde una enfermera que pasea por el corredor de la planta de ingresados sin saber que ya no hace falta que visite el siguiente enfermo de la lista porque ya existe un robot que utiliza Big Data -el cual sabe cuál será la próxima necesidad del enfermo-; pasando por los hoteles en que ya no existe el personal sino que los robots trabajan por ellos; hasta las máquinas-robots que seleccionan la información que es noticia convirtiéndose en verdaderos competidores de los ya de por sí 'heridos' periodistas. "Al futurohabrá menos intermediarios, muchas de las grandes empresas son las más grandes en sus sectores a pesar de que no tengan en propiedad los productos que las han hecho grandes", explica.
Vídeo de la CNBC sobre el programa piloto de un hotel californiano que utiliza robots.
También, avanza Vidal, "muchas de las ocupaciones que ahora existen dejarán de hacerlo. A los procesos se ejecutarán sólo los que sean imprescindibles, como en Tokyo donde ya han empezado a circular los primeros taxis sin conductores", ejemplifica. Y no hay que ir tan lejos, porque según Marc Vidal, de aquí a nada, los refrigeradores dejarán de estropearse "porque traerán integrado un software que se actualizará automáticamente", afirma. El fin de la obsolescencia programada, tal vez?, nos podríamos preguntar.
"Todos son cambios... antes Kodak era el referente de la fotografía y ahora lo es Instagram", cierra mientras suena la música épica, de nuevo, de gran relato cinematográfico... cómo si el fin de una época estuviera a punto de llegar. El cierre de un ciclo para el cual habrá que estar preparado, por eso "tengas la edad que tengas, no te jubiles tecnológicamente, creativamente. Todo sucede en un marco digital y la prueba-error es la natura de nuestros actos".
Inmediato, próximo, urgente... la rapidez con la cual llegan los cambios no esperará nadie, viene a decir Vidal. "Venimos de un Internet técnico (1993) vinculado a quienes controlaban Internet; después llegó la Internet empresarial (2001), la Internet social (2008) y después la Internet automático (2013) donde se producen procesos que se reenvian y auto-recortan sólo. Y llegará la Internet de las Cosas el 2018, cuando todos los objetos estarán conectados en el high frequency knowledge", pronostica el también emprendedor.
Él ya ha vivido algunas experiencias, como cuando sentado en la terraza de un hotel de Barcelona, un drone –"que no tenía permiso para sobrevolar el espacio aéreo", matiza- le trajo el abridor necesario para probar la botella de vino que sentaba encima su mesa. También ha subido en uno de los seis coches autopilotats que circulan, bajo autorización gubernamental, por las calles de la ciudad de Londres. "Tengamos cura con la exponencialitat de nuestra evolución como especie", avisa con cierto tono paternalista que no sorprende cuando, durante la ponencia, enumera con imágenes ejemplos de como la vida ya no es la que era gracias (o por culpa) de la tecnología.
Ejemplos del cambio tecnológico
Desde una enfermera que pasea por el corredor de la planta de ingresados sin saber que ya no hace falta que visite el siguiente enfermo de la lista porque ya existe un robot que utiliza Big Data -el cual sabe cuál será la próxima necesidad del enfermo-; pasando por los hoteles en que ya no existe el personal sino que los robots trabajan por ellos; hasta las máquinas-robots que seleccionan la información que es noticia convirtiéndose en verdaderos competidores de los ya de por sí 'heridos' periodistas. "Al futurohabrá menos intermediarios, muchas de las grandes empresas son las más grandes en sus sectores a pesar de que no tengan en propiedad los productos que las han hecho grandes", explica.
Vídeo de la CNBC sobre el programa piloto de un hotel californiano que utiliza robots.
También, avanza Vidal, "muchas de las ocupaciones que ahora existen dejarán de hacerlo. A los procesos se ejecutarán sólo los que sean imprescindibles, como en Tokyo donde ya han empezado a circular los primeros taxis sin conductores", ejemplifica. Y no hay que ir tan lejos, porque según Marc Vidal, de aquí a nada, los refrigeradores dejarán de estropearse "porque traerán integrado un software que se actualizará automáticamente", afirma. El fin de la obsolescencia programada, tal vez?, nos podríamos preguntar.
"Todos son cambios... antes Kodak era el referente de la fotografía y ahora lo es Instagram", cierra mientras suena la música épica, de nuevo, de gran relato cinematográfico... cómo si el fin de una época estuviera a punto de llegar. El cierre de un ciclo para el cual habrá que estar preparado, por eso "tengas la edad que tengas, no te jubiles tecnológicamente, creativamente. Todo sucede en un marco digital y la prueba-error es la natura de nuestros actos".