El nivel de innovación en Catalunya se ha incrementado un 11,5% en los últimos siete años. Así lo indica el informe Europeo de Innovación, publicado por la Comisión Europea y que sitúa a Catalunya como la quinta comunidad más innovadora del Estado, sólo superada por Asturias, País Vasco, Madrid y Navarra. Según el documento, el nivel de innovación en Catalunya se sitúa por encima de la media española (con una puntuación de 119 sobre un índice de 100) y la europea (con una puntuación de 106), siendo la investigación científica licitud de marcas registradas o la formación en habilidades digitales algunas de sus principales fortalezas.
Según la escala elaborada por la Comisión Europea, Catalunya se considera una región "fuertemente innovadora", el segundo escalón dentro de la clasificación después de obtener una puntuación global de 106 puntos sobre una escala de 100. El primer escalón está formado por aquellos territorios con una puntuación superior a 125 (conocidos como innovadores líderes), el segundo por aquellos con una puntuación entre 100 y 125 (donde se encuentra Cataluña), el tercero por los que suman entre 70 y 100 puntos (moderadamente innovadores) y el cuarto por los que alcanzan menos de 70 puntos (innovadores emergentes).
En el informe, Catalunya logra mejor puntuación que la media europea en 11 de los 21 indicadores que se tienen en cuenta para evaluar la innovación de cada territorio. Donde más destaca el país es en la investigación científica, tanto a través de publicaciones internacionales como de publicaciones público-privadas. También resalta en el ámbito de la formación digital, la educación terciaria, la venta de productos innovadores o la solicitud de marcas registradas.
Catalunya se considera una región "fuertemente innovadora", el segundo escalón dentro de la clasificación después de obtener una puntuación global de 106 puntos sobre una escala de 100
Por el contrario, las debilidades más notables del país son el grado de colaboración con las pymes en proyectos innovadores, el bajo empleo en empresas innovadoras, la introducción de procesos innovadores en los modelos de negocio o el alto número de emisiones contaminantes, entre otros.
España respecto a la Unión Europea
En línea con Catalunya, el nivel de innovación en el Estado ha mejorado un 9,7% en los últimos siete años. Sin embargo, España obtiene una puntuación de 89,2 en un índice de 100, situándose así por debajo de la media europea y dentro de la categoría de país "moderadamente innovador".
En el conjunto de España, las principales fortalezas respecto a la UE son la digitalización, el porcentaje de población con educación terciaria, la venta de productos innovadores o la productividad de sus recursos, mientras que en el apartado de debilidades aparecen la inversión en investigación y desarrollo (I+D), el bajo grado de empleo, la solicitud de patentes o la falta de innovación en las pymes.
En cuanto al conjunto de la Unión Europea, Dinamarca ha pasado a ser el país más innovador (137,6 puntos), tras superar a Suecia (134,5), que el año pasado encabezaba la clasificación. Dentro de la categoría de innovadores líderes también aparecen Finlandia, Países Bajos y Bélgica, mientras que los países "fuertemente innovadores" -donde también está Catalunya- son Austria, Alemania, Luxemburgo, Irlanda, Chipre y Francia.
Dinamarca ha pasado a ser el país más innovador (137,6 puntos), después de superar a Suecia (134,5)
A nivel global, el rendimiento de la Unión Europea es ligeramente mejor que el de China y, aunque inferior a Australia, la diferencia entre ambas regiones se ha reducido. Por el contrario, la brecha innovadora de la UE respecto a Canadá, Corea del Sur y Estados Unidos se ha ensanchado.