22
de Junio
de
2016
Ya hace meses que los rumores que Apple trabaja en el diseño y fabricación de un coche han cogido fuerza. Y a pesar de que puede ser que al final todo quede en nada cómo ya pasó con el supuesto televisor de la marca de la manzana, ahora mismo el Apple Caro es un rumor que todo el mundo da por hecho.
Actualmente casi todos los coches nuevos incorporan sensores de aparcamiento y cámaras de visión del última, pero como siempre pasa con los vehículos, todo el parque de automóviles actual –y que todavía no está obsoleto–, dispone de muy pocas opciones aftermarket para añadir esta funcionalidad.
Y como puede ser que un teléfono móvil de 600 euros reciba varias actualizaciones de software durante su vida útil, que le aportan nuevas funcionalidades y en cambio, un vehículo que cuesta entre 10.000 y 50.000 euros no? Con este problema en mente, tres empleados de Apple fundaron RearVision, una startup que ha diseñado un marco para las placas de matrícula –denominado Pearl–, que incorpora una cámara de 180°.
La instalación es facilíssima. Basta con situarlo sobre la matrícula y fijar un tornillo. A partir de aquí, Pearl se conecta al teléfono móvil vía Bluetooth para transmitir la imagen en tiempo real.
Un golpe montada, no hay que preocuparse de cargarla ni conectarla al coche. El mismo marco del Pearl incorpora un panel solar que recarga el dispositivo con la luz solar. Según sus fabricantes, un día entero de luz equivale a una semana de uso del dispositivo. Y además, sus baterías tienen capacidad para almacenar suficiente energía para funcionar durante un mes entero.
Además, Pearl incluye un pequeño enchufe que se conecta al puerto de datos del vehículo –si, la mayoría de coches modernostienen uno–, para obtener información de la velocidad. Gracias a esto, cuando el usuario acciona la marcha atrás del coche, la pantalla del móvil muestra automáticamente la imagen de la cámara –y emite señales acústicas de proximidad de obstáculos–, y cuando el vehículo se esté moviendo en dirección normal, la app de Pearl mostrará un menú de aplicaciones para el coche –como por ejemplo Apple Maps, Google Maps, Spotify o Apple Music–.
De momento, Pearl sólo se puede adquirir en los Estados Unidos –y hoy por hoy en fase de precomanda– por 499 dólares. La compañía espera empezar a hacer los primeros envíos antes de acabar el verano. Desgraciadamente, todavía no hay información de cuando estará disponible para vehículos europeos donde, entre otras peculiaridades, las matrículas tienen diferentes medidas y los puertos de datos de los vehículos funcionan de otro modo.
Actualmente casi todos los coches nuevos incorporan sensores de aparcamiento y cámaras de visión del última, pero como siempre pasa con los vehículos, todo el parque de automóviles actual –y que todavía no está obsoleto–, dispone de muy pocas opciones aftermarket para añadir esta funcionalidad.
Y como puede ser que un teléfono móvil de 600 euros reciba varias actualizaciones de software durante su vida útil, que le aportan nuevas funcionalidades y en cambio, un vehículo que cuesta entre 10.000 y 50.000 euros no? Con este problema en mente, tres empleados de Apple fundaron RearVision, una startup que ha diseñado un marco para las placas de matrícula –denominado Pearl–, que incorpora una cámara de 180°.
La instalación es facilíssima. Basta con situarlo sobre la matrícula y fijar un tornillo. A partir de aquí, Pearl se conecta al teléfono móvil vía Bluetooth para transmitir la imagen en tiempo real.
Pearl RearVision from Pearl donde Vimeo.
Un golpe montada, no hay que preocuparse de cargarla ni conectarla al coche. El mismo marco del Pearl incorpora un panel solar que recarga el dispositivo con la luz solar. Según sus fabricantes, un día entero de luz equivale a una semana de uso del dispositivo. Y además, sus baterías tienen capacidad para almacenar suficiente energía para funcionar durante un mes entero.
Además, Pearl incluye un pequeño enchufe que se conecta al puerto de datos del vehículo –si, la mayoría de coches modernostienen uno–, para obtener información de la velocidad. Gracias a esto, cuando el usuario acciona la marcha atrás del coche, la pantalla del móvil muestra automáticamente la imagen de la cámara –y emite señales acústicas de proximidad de obstáculos–, y cuando el vehículo se esté moviendo en dirección normal, la app de Pearl mostrará un menú de aplicaciones para el coche –como por ejemplo Apple Maps, Google Maps, Spotify o Apple Music–.
De momento, Pearl sólo se puede adquirir en los Estados Unidos –y hoy por hoy en fase de precomanda– por 499 dólares. La compañía espera empezar a hacer los primeros envíos antes de acabar el verano. Desgraciadamente, todavía no hay información de cuando estará disponible para vehículos europeos donde, entre otras peculiaridades, las matrículas tienen diferentes medidas y los puertos de datos de los vehículos funcionan de otro modo.