Sólo un 10% de las startups superan con éxito sus primeros tres años de vida. Más del 50% de las firmas emergentes suelen fracasar en sus primeros cuatro años, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo. Durante 2023, las firmas emergentes del Estado habrían generado más de 7.000 puestos de trabajo. Ésta es una de las principales conclusiones de un informe conjunto realizado por la división tecnológica de CaixaBank y el área emprendedora del IESE Business School. El sondeo se ha realizado a partir del análisis de 987 empresas.
Catalunya y Madrid siguen siendo los territorios que concentran mayores volúmenes de startups. Por detrás aparecen otros puntos como Comunidad Valenciana, Andalucía y Euskadi. En clave de sectores, la parte alta de la clasificación está liderada por el turismo, la salud, el impacto social y la alimentación. El estudio también señala que cuanto mayor es el número de empresas en una zona más sectores se acumulan. El 60% de las empresas vaticina una facturación superior a 250.000 euros y una media de ventas de 1,2 millones de euros.
El 77% de las firmas analizadas valoran positivamente tener un producto o servicio superior al de la competencia. En otro orden, el 59,5% de los fundadores de startups acumulan una experiencia laboral superior a los 11 años. Gran parte de estas personas entienden un proyecto emergente como el reto de dar cobertura a una necesidad detectada desde su anterior puesto de trabajo. El 84% de los fundadores y fundadoras de las startups tienen un grado universitario y un 7% han superado estudios de formación profesional.