'Think tank' a la catalana

El término en inglés está bastante implementado, pero se tiene que fomentar el uso de su denominación en catalán como 'fábrica de ideas' o 'laboratorio de ideas'

A pesar de que la palabra think tank està muy implementado, existe el término en català | Termcat
A pesar de que la palabra think tank està muy implementado, existe el término en català | Termcat
TERMCAT
Barcelona
14 de Febrero de 2019

Si hay un término que condensa un concepto con una imagen contundente este es think tank. El inglés tiene la virtud de ser una lengua creadora de termas, por la simple razón que las sociedades creadoras de conceptos y de contenidos son angloparlants. El trabajo de las otras lenguas, las lenguas en que se expresan sociedades receptoras, es encontrar palabras tan acertadas como nos parecen las inglesas.

 

En el caso de un think tank, una organización que interviene en la vida política de una sociedad mediante la producción de conocimientos, la difusión de valores o el análisis de los sistemas políticos y de las políticas públicas, hemos tenido que buscar y recercar, pensar y repensar, preguntar y repreguntar para llegar al resultado que aquí os exponemos. En catalán podemos decir fábrica de ideas o laboratorio de ideas. Las dos denominaciones arrastran una imagen del todo adecuado. Fábrica de ideas induce a pensar en producción industrial de ideas, conocimiento, opiniones, en cantidad, hechas de acuerdo con unos patrones ideológicos. La otra denominación propuesta, laboratorio de ideas, nos sugiere la imagen de la bata blanca, de elaboración controlada de ideas, de provatures, de análisis, de lanzamos esta propuesta y a ver qué pasa, a ver como funciona.

Fomentar el término catalán 'fábrica de ideas' es un reto para todas las lenguas fuertes que sufren la potencia creadora del inglés

 

Pensaréis que hacemos tarde, que el término inglés está completamente instalado en catalán. El término circula en inglés, es cierto, pero en catalán hemos documentado muchas propuestas de denominación, y las hemos tenido en cuenta. Ahora hemos puesto orden a toda la información y hemos hecho las propuestas que hemos considerado más adecuadas. Es un reto, pero un reto no tan sólo para el catalán, sino también para nuestras vecinas, lenguas fuertes que, aun así, sufren la potencia creadora del inglés. La complejidad del reto se refleja, por ejemplo, en la larga lista de equivalentes que hemos documentado y que encontraréis a la ficha del término. Y noestán todos, sólo el más frecuentes. Consultáis el Cercaterm y lo veréis.