Hace menos de un año, Uber inició dos ambiciosos planes de futuro que parecían sacados de una película futurista. La compañía empezó a investigar en el campo de los vehículos sin conductor, con el objetivo de acabar disponiendo de una flota de vehículos autónomos capaces de recoger y transportar pasajeros sin intervención humana. Por si esto no fuera suficiente, el segundo objetivo de futuro era disponer de vehículos aéreos, capaces de realizar despegues y aterrizajes verticales –Vertical Take-Off and Landing Vehículos– en azoteas y helipuertos urbanos, de forma que puedan transportar usuarios entre edificios.
El más sorpresivo, pero, es que Uber prevé que viajar en estos vehículos –que serán 100% eléctricos– tenga un coste de 0,85 dólares por cada kilómetro y medio de recorrido. Un precio que, por supuesto, se reduciría todavía más si las dos tecnologías se fusionaran y la compañía acabara disponiendo de vehículos aéreos sin conductor.
Ahora hace pocos días, la cabeza de productos de Uber, Jeff Holden, anunció en una conferencia a Dallas que las previsiones de la empresa de transporte de disponer de los primeros prototipos de coche volador en 2026 se avanzaban hasta el 2020. Nada más y nada menos que 6 años! Y que las dos ciudades escogidas para las primeras pruebas piloto serien Dubai y Dallas.
De hecho, la compañía está tan convencida que su futuro pasa por los aires, que la construcción de las primeras plataformas de despegue y aterrizajeempezarán a Dallasa principios del año próximo, con la intención de presentar el servicio a la exposición mundial de Dubai 2020.
Esperamos que Uber tenga más éxito en este campo que en el de los vehículos autónomos, puesto que han tenido que suspender sus pruebas a Tempe (Arizona) debido a un accidente de tráfico donde su coche quedó completamente volcado.