• Activos digitales contra la "dictadura de las corporaciones"

Activos digitales contra la "dictadura de las corporaciones"

La gobernanza del metaverso y sus capacidades como internet del valor proponen un conflicto entre la descentralización de la propiedad y el dominio del 'big tech'

La interfaz de Meta, la nueva identidad de Facebook | EP
La interfaz de Meta, la nueva identidad de Facebook | EP
Barcelona
23 de Noviembre de 2021

La gráfica de los usuarios de la tecnología blockchain, según explica el CTO de Caelum Labs AlexPuig, "sigue una evolución parecida a la de internet". La entrada en entornos digitales descentralizados, y las nuevas capacidades que ellos ofrecen, es un proceso cada vez más presente en la actividad de muchos usuarios. La transición de la web social – 2.0 – a la internet del valor – 3.0 – no está todavía completa, pero la tecnología "está casi desarrollada". Los múltiples metaversos que están todavía en construcción en las sedes de los gigantes tecnológicos del mundo abren, en este sentido, la pregunta de cómo se organizará un espacio capaz de concentrar toda la actividad digital de aquellos que operen.

 

"¿Serán los ciudadanos quienes manden a los metaversos o acontecerán dictaduras de las grandes corporaciones?", se cuestiona QuirzeSalomó, del Centro Blockchain de Catalunya. La usabilidad, las capacidades y la gobernanza del metaverso en relación con la tecnología blockchain han sido el sujeto de debate de una de las ponencias celebradas a a el Llotja de Mar en el marco del Tech Spirit Barcelona. La pregunta sobre el gobierno de los -versos, estos "espacios donde pueda llevar la mochila con todos mis activos digitales", cómo explica el CTO de Freeverse.io ToniMateos, es una cuestión especialmente urgiendo después de la aceleración de su desarrollo que ha supuesto la pandemia.

Salomó: "¿Serán los ciudadanos quienes manden en los metaversos o se convertirán en dictaduras de las grandes corporaciones?"

La apuesta de Puig, en este sentido, se encuentra en la descentralización. Las conocidas como Organizaciones Autónomas Descentralizadas, redes de usuarios que operan entre ellos mediante las capacidades de la tecnología blockchain, suponen una nueva propuesta de gestión del hecho social en los entornos digitales. "La gobe se está reinventando con las DAOs", afirma el CTO de Caelum, que ve en la tecnología posibilidades desde financieras hasta orgánicas. Puig observa el surgimiento de "mecanismos de gestión de conflictos, sistemas de votaciones basados en tokens" – potencialidades diversas que permiten la toma de decisiones y la implementación de procedimientos diversos de una forma descentralizada, sin depender de los "dictadores corporativos" que temía Salomó.

 

Para Mateos, esta cuestión se resuelve con las mismas capacidades técnicas del blockchain y los entornos que permite. "Escéptico" con cualquier tipo de superestructura de gobierno que se construya encima de la cadena de bloques, el CTO de Freeverse prevé que "si surgen paradigmas de gobernanza diferentes, será porque la infraestructura es diferente". La descentralización de la propiedad de los activos en los entornos digitales supone, según Mateos, "un patrón diferente del que había antes", que retira las capacidades de unos centros que la ceden a los usuarios y las pone en los ciudadanos directamente.

Las posibilidades de cambio se encuentran, además, en el hecho que estas macrocorporaciones que podrían estar tentadas de apropiarse del control del metavers son lateadopters. Según Puig, "las grandes empresas tardan mucho a entrar en esta tecnología, y lo hacen como un elefante en una cristalería", mientras que los usuarios, individualmente – y también colectiva, gracias a las capacidades de la descentralización – ya están "comprando NFTs, creando su identidad, preocupándose por su privacitat en mundos virtuales". Incluso el ahorro toma un cariz diferente. "Hay jóvenes – establece Puig – que piensan en los activos digitales como ahorro, y no en el dinero".

Filatelia evolutiva

"Nunca he sido un gran coleccionista", reconoce Mateos, que ve la potencialidad de los activos digitales en su adaptabilidad y capacidad evolutiva, mucho más allá de la identificación de la propiedad que suponen los NFTs. Freeverse, de hecho, se centra en esta mutabilidad. La compañía ofrece una plataforma que permite crear valor añadido de los activos digitales. "Si se compra un NFT y se vende más adelante exactamente igual, por el medio solo hay especulación", lamenta Mateos, que propone un modelo interactivo que favorece el engagement de los consumidores y los inversores. "Nuestros clientes huyen de la especulación", afirma, exponiendo un modelo contrario en la exclusividad y la escalada de valor que se asocia al mercado de tokens: sus usuarios reparten "millones de NFT a casi coste cero, y los monetitzen cuando los usuarios interactúan con ellos". Es decir, tokens que cambian, ganan valor y evolucionan cuando se usan, sea entrando en la aplicación o jugando con ellos a un videojuego.

Mateos: "Si una app no me deja llevar mis activos digitales, me iré a la del lado"

La clave para que esta perspectiva funcione es la interoperabilidad: que los activos que se adquieren y evolucionan en un metaverso – o un espacio del metaverso – sean utilizables en todos los otros. "Antes cuando tú ibas a una aplicación a comprar algo, aquello se quedaba allá – ahora puede pasar a tu mochila de activos digitales, y llevar esta mochila allá donde vayas" plantea Mateos, que considera que aquellos entornos que no dejen entrar propiedades digitales surgidas a otros programas serán irrelevantes. "Si una app no me deja llevar mis activos digitales, me iré a la del lado que hace exactamente el mismo, pero sí que es interoperable", afirma.

Más allá de los tokens como portadores de valor, una de las propuestas que ofrece una verdadera interoperabilidad en el metavers es usarlos como garantía de un servicio. Además de la evaluación financiera o artística de un NFT, por ejemplo, se pueden usar "para avalar un préstamo, o tener acceso en un canal exclusivo de discord". Los tokens pueden convertirse, en este sentido, en tarjetas de filiación de un club: tener un cierto activo en propiedad dentro de la mochila permitirá, en unos metaversos muy conectados, acceder a aplicaciones e interfaces cerradas a otros usuarios. "La gracia de las finanzas descentralizadas es conectar productos financieros – afirma Puig – y la los NFTs es jugar a varios juegos".

Comprarse un 'Iniestazo'

La entrada de usuarios e inversores en los entornos descentralizados han hecho que este mercado acontezca atractivo para empresas y personalidades diversas. RogerdelSol, de la empresa de management Sports and Life – gestores, entre otros, de los derechos de imagen de Andrés Iniesta – apunta que "en los últimos meses cada vez nos llegan más peticiones para saber cómo va el mundo NFT" por parte de sus representados. Desde futbolistas con imágenes de jugadas o momentos clave hasta cantantes buscando emular Travis Scott y hacer directos en videojuego, las figuras públicas buscan encontrar su lugar al internet del valor.

Del Sol: "Los NFTs son una forma de construir un legado digital"

Del Sol, de hecho, está de acuerdo en la potencia de los tokens como activos en constante mutación, más allá del valor que pueden llevar en su momento de venta o en mercados secundarios. La agencia, de hecho, ha rechazado los marketplaces abiertos y establecidos, y ha "desarrollado un espacio propio, para poder ofrecer NFTs que puedan evolucionar con el tiempo". A pesar de que, reconoce, la entrada en este mercado "todavía llega muy de nuevo" a la firma, el proyecto ofrece a los representados una nueva relación con sus fans, y una nueva forma de elaborarse una identidad en los universos digitales. "Hemos cogido el hecho de tener piezas de arte exclusivas – concluye el directivo – como una herramienta para dejar un legado digital".