Hoy es el día. Volvemos a la presencialidad y volvemos a premiar el trabajo, esfuerzo y constancia de los jóvenes empresarios del país. Lo hacemos con ganas y conscientes que, después de la gran crisis que la pandemia nos ha traído, las empresas somos más necesarias que nunca. No tengo claro si la covid ha cambiado en algo la percepción que tiene la sociedad del empresario, me gustaría pensar que si, pero lo que si que tengo claro es que gracias al ADN empresarial de los jóvenes empresarios, para crear ocupación con valor, para hacer que las políticas de igualdad sean la norma y que los objetivos de desarrollo sostenible dejen de ser una nomenclatura más que hayamos de cumplir por ley, gracias a las empresas del futuro, nuestra sociedad será, sin duda, mucho mejor.
Determinación, perseverancia, valentía, compromiso o responsabilidad son palabras que nos definen los jóvenes empresarios y no porque se hayan dicho ya en muchas ocasiones son menos ciertas. El premio Joven Empresario quiere premiar este ADN, la ilusión, la capacidad de superación, el talento, el empujón y la innovación. Premiar que hay jóvenes que tenemos ganas y que queremos impulsar cambios a través de nuestras ideas y de nuestras empresas.
El camino de hacer empresa es muchas veces un camino solitario. Y esta es la gran virtud de Aijec. Acompañar los y las valientes que optamos para crear y hacer crecer proyectos empresariales. Porque las empresas tenemos necesidades. Necesitamos que las administraciones dejen de ponernos trabas, necesitamos seguridad jurídica y necesitamos ayuda para dar visibilidad a nuestras empresas. Y no hay que decir que necesitamos también que lleguen las ya tan famosas y prometidas ayudas de los fondos Next Generation. Unas ayudas que tenemos que conseguir que lleguen a todas las empresas, especialmente a pequeñas y medianas, las grandes olvidadas.
Los jóvenes empresarios hemos demostrado sobradamente que vemos las oportunidades
La crisis está a ojos de quienes no ven las oportunidades. Y los jóvenes empresarios hemos demostrado sobradament que vemos las oportunidades. Hemos demostrado que somos expertos en superar obstáculos y expertos en seguir, con ilusión, convirtiendo, si hace falta, los contratiempos en nuestros aliados. La pandemia ha llevado muchos cambios a nuestras vidas, demasiados, pero también ha demostrado a muchos, que con visión, ganas e ideas modernas e innovadoras, podemos superar cualquier situación.
Hoy no solo celebramos el éxito de los jóvenes empresarios, celebramos que Aijec Jóvenes Empresarios cumple 35 años. Fueron la primera patronal de jóvenes empresarios de Catalunya y fundadora de la confederación española de jóvenes empresarios que este mismo año celebra sus 30 años. 35 años intensos en los que hemos vivido grandes momentos, grandes cambios en nuestra sociedad y algunas grandes crisis mundiales. Y durante todo este camino, aquí ha estado Aijec, dando la mano para que los jóvenes empresarios nos sintamos algo menos solos. 35 años en los que Aijec, al igual que los jóvenes empresarios, se ha ido reinventando, con la misma ilusión, esfuerzo y pasión que el primer día, para servir en el país y la sociedad en la que vivimos.
Hoy es un gran día. Lo es para todos los que esta noche irán a dormir con un reconocimiento público por una idea que han conseguido hacer realidad y lo es, no tengo ninguna duda, para todos nosotros, para nuestra sociedad, que entre tanta noticía pesimista, puede ir a dormir esperanzada con el futuro empresarial de nuestro país.