Los mejores países del mundo

24 de Octubre de 2022
Oriol Amat | VIA Empresa

Hace pocos días, la Wharton School de la Universidad de Pensilvania ha hecho público el ranking World Report Best Countries 2022. Este ranking se ha hecho entrevistando a 17.000 personas y se evalúan 73 atributos que tienen a ver con las características económicas, políticas y sociales de un total de 85 países de todos los continentes.

Este tipo de informes es muy interesante porque permite tener una idea de cómo nos vemos a nivel internacional y también son útiles para identificar posibles temas en los que hace falta mejorar. En la última edición del ranking, los diez mejores países han sido por este orden:

1. Suiza

2. Alemania

3. Canadá

4. Estados Unidos

5. Suecia

6. Japón

7. Australia

8. Reino Unido

9. Francia

10. Dinamarca

Como en años anteriores, los países del centro y el norte de Europa ocupan una buena parte de las primeras posiciones. Como el ranking se lleva a cabo por estados y no regiones, en el ranking no hay información relativa a Catalunya. Por eso, podemos analizar los resultados de España, que este año ha quedado en la posición 16. Del diagnóstico de España podemos destacar los atributos mejor puntuados y los peores puntuados.

Como en años anteriores, los países del centro y el norte de Europa ocupan una buena parte de las primeras posiciones

Entre los temas en los que España sale mejor puntuada hay:

· Potencial turístico: climatología, belleza del paisaje, gastronomía, atractivo de pueblos y ciudades...

· Cultura: museos, arquitectura...

· Amigable: potencial de diversión, alegría de la población...

Y como contrapunto, los aspectos en qué España sale peor evaluada son:

· Facilitado para hacer negocios: exceso de burocracia que genera muchos costes, acceso a la financiación...

· Entorno económico: costes de fabricación muy altos, entorno fiscal poco favorable, experiencia tecnológica, infraestructura digital...

· Transparencia del gobierno: información, rendición de cuentas...

· Emprendería: creación de empresas, capacidad de innovación...

Es un diagnóstico que confirma lo que ya sabemos desde hace años. Por un lado, tenemos que mejorar en muchos de los temas que hacen referencia a la facilidad para hacer negocios, entorno económico, transparencia e innovación. Como son temas muy diagnosticados, solo falta que llegue el día en el cual pongamos hilo a la aguja. Por otro lado, como que las grandes fortalezas (potencial turístico, por ejemplo) las podemos derrochar si hacemos una mala gestión, conviene que no nos despistemos en todo aquello que pueda echar a perder nuestro patrimonio (natural, turístico, cultural, arquitectónico…).

En definitiva, continúa pendiente el reto de no ponerlo tan difícil a la actividad económica y al mismo tiempo cuidar y mejorar el patrimonio que hemos heredado.