Nací en Igualada y renací en Alemania, Polonia, Turquía, Dubai, Egipto... Cada vez que he pasado una temporada fuera de casa he afrontado nuevos retos, he sumado experiencias y he recordado la importancia de las pequeñas cosas cotidianas que hacen la vida agradable. Cuando eres una mujer en un mundo claramente ocupado por hombres, como lo eran antes los departamentos de exportación, es imprescindible construir una autoestima sana, ser resiliente, tener una mente abierta y creer que si no nos limitamos, podemos llegar donde queramos.
"Cuando eres una mujer en un mundo claramente ocupado por hombres, como lo eran antes los departamentos de exportación, es imprescindible construir una autoestima sana, ser resiliente, tener una mente abierta y creer que si no nos limitamos, podemos llegar donde queramos"
Vivimos en un mundo que presume de una apariencia perfecta, donde la mujer tiene cada vez una mayor participación en la organización de la sociedad pero la igualdad de oportunidades de mujeres y hombres en el ámbito laboral todavía es un debate necesario. Todavía tenemos que combatir la discriminación salarial que sufren las mujeres y lograr la presencia equitativa de mujeres en lugares de decisión. Todas hemos podido vivir de cerca anécdotas que se esconden detrás del 23,3% de la brecha salarial que hay entre hombres y mujeres en Catalunya.
Uno de los sectores donde existe una fuerte masculinización es en el sector industrial. El 2018 presentamos el estudio elaborado por el Observatorio de la Industria titulado Las mujeres en el sector industrial en Catalunya, donde analizábamos el papel de la mujer en el sector industrial y las causas de su escasa representación. Sólo el 28% de los puestos de trabajo en este sector están ocupados por mujeres y la brecha salarial es superior a la del conjunto de la economía. Concretamente, en la industria, la mayoría de los lugares donde trabajan las mujeres tienen que ver con la administración y no con trabajos de innovación.
"Todas hemos podido vivir de cerca anécdotas que se esconden detrás del 23,3% de la brecha salarial que hay entre hombres y mujeres en Catalunya"
Por qué no hay mujeres en la industria y a medida que vamos subiendo de cargos, las mujeres van desapareciendo? Hay un problema de base que es la carencia de orientación profesional desde la infancia, que nos acompaña a lo largo de toda la formación. El 75% de las mujeres ingenieras son hijas de padres ingenieros. La mayor parte de las mujeres que trabajan o quieren trabajar en la industria es porque tienen familiares que trabajan o han trabajado.
Este curso 2017-2018, de los alumnos matriculados en carreras TIC, sólo un 13% son mujeres, mientras que un 87% son hombres. Así pues, la persistencia de roles y estereotipos de género también se manifiesta en la elección de los estudios superiores.
Estos indicadores nos ponen en alerta. En esta nueva economía 4.0 donde harán falta muchos perfiles de carácter tecnológico, hay pocas mujeres que estudian las carreras STEM, y esto, quiere decir que en el futuro tampoco tendremos representación femenina ni en mandos intermedios, ni en cuadros directivos, ni en perfiles técnicos si no cambiamos esta tendencia.
Si el elemento clave de competitividad en esta economía de la industria 4.0 es el talento, tenemos que actuar porque haya una mayor incorporación de la mujer en la industria, en la alta dirección y en los órganos de gobierno.
Y esto sifnifica dar visibilidad a referentes femeninos en el ámbito de la empresa y la emprendeduría, para combatir los estereotipos de género entre niñas y niños. Por eso es tan importante apoyar a todas aquellas iniciativas que ponen en el imaginario colectivo mujeres increíbles.
"Las preferencias no se construyen solas, dependen de las alternativas disponibles, los referentes y las expectativas. Creamos referentes y combatimos la desigualdad de género entre todas y todos"
En este contexto, desde el Departament d'Empresa i Coneixement creemos que las empresas son un actor importante en la construcción de una sociedad más justa. Cada día hay un mayor número de empresas que, más allá de conseguir sus objetivos, están comprometidas en el desarrollo del bienestar social. Por eso tenemos la voluntad de impulsar acciones, medidas y políticas de igualdad en el ámbito empresarial, para avanzar con perspectivas de género y conseguir que donde haya decisiones haya un 50% de mujeres.
Las preferencias no se construyen solas, dependen de las alternativas disponibles, los referentes y las expectativas. Creamos referentes y combatimos la desigualdad de género entre todas y todos.