Como enamorar tus trabajadores

David Tomás, cofundador de Cyberclick, explica las mejores herramientas para potenciar la 'Employee Experience' y no olvidar que, aparte del cliente, el empleado también tiene que estar contento

Cyberclick aspira a ser la empresa más feliz del mundo
Cyberclick aspira a ser la empresa más feliz del mundo
David Tomás
29 de Marzo de 2017
Hoy en día tenemos que entender que el más importante de las empresas son las personas que las conforman. Sin ellas nada sería posible, son el ADN que las hace estar vivas. Por este motivo, las personas que lideran tienen que estar buscando formas nuevas de mejorar la experiencia del equipo de trabajo.

Todo empieza para hacer muy bien el proceso de selección. Las diferentes etapas para contratar alguien no se tienen que centrar sólo a evaluar las capacidades profesionales de la persona, sino también a mirar cuáles son sus valores y si estos encajarán con los de la empresa donde quiere entrar. Si el candidato ha pasado con éxito la fase de evaluación profesional, es bueno realizar entrevistas grupals en las cuales participe parte del equipo y la persona que tiene que entrar. Así las dos partes se pueden conocer y ver si se sentirán a gusto trabajando juntas.

Buen recibimiento
Otro factor interesante puede ser el Welcome Pack o kit de bienvenida. Compuesto de material de oficina y pequeños detalles que hagan más confortable y acogedora la llegada del nuevo componente del equipo. A nuestra empresa, Cyberclick, nos gusta regalar material útil y divertido por el día a día, una taça, tabla-its para apuntar las mejores ideas, el libro La empresa más feliz del mundo y un libreto donde aparecemos todos y se explica quién somos cada uno de nosotros, en qué somos expertos y qué son nuestras pasiones.

Asesoramiento
Para ayudar el recién llegado es bueno asignar un compañero que le hará de mentor. Así tendrá un guía para las primeras semanas y alguien a quién recorrer como referente en caso de cualquier duda o necesidad. Esta figura no tiene por qué ser la cabeza, sino que puede ser una persona de su misma área de trabajo o alguien que se haya ofrecido voluntariamente. Recomiendo marcar una fecha, por ejemplo un mes más tarde, para evaluar como le está yendo todo y qué es su evolución. Siempre buscando el bienestar de la persona y mejorándolo.

Medir la felicidad
Un punto muy importante es el de medir la felicidad. O el que es el mismo, analizar regularmente como se encuentran cada uno de los componentes del equipo de trabajo. Sin esta información es imposible saber si el que está haciendo la empresa realmente ayuda los empleados a estar mejor y ser más felices.

Una manera de hacerlo es pedir a la gente cada día, semana o mes como se encuentran a través de un cuestionario. También se puede hacer a través de entrevistas personales un golpe cada cierto tiempo. Eso sí, se tiene que hacer siempre con la misma regularidad y comparar la información para ver la evolución de todo el mundo. Sólo así se puede saber si se va por el buen camino.

Por los que encara no lo vean claro, pondré un ejemplo. A Cyberclick aplicamos el que denominamos el Semáforo de la Felicidad. Cada día pedimos a las personas del equipo que respondan un pequeño cuestionario. Este tiene tres sencillas preguntas y dispone de una sección de comentarios. La encuesta incluye "En qué estado de ánimo has llegado hoy?", "En qué estado de ánimo tevas hoy?", "Del 1 al 4, cuánto te ha gustado el que has hecho hoy?" y "Si quieres hacer algún comentario, aquí tienes un espacio".

Para las dos primeras preguntas todos podemos elegir entre las opciones "Súper Verde", "Naranja" o "Rojo". Antes poníamos "Verde", pero ahora ya no, porque hemos visto que si la persona está bien no es necesario que responda estas preguntas. Sólo cuando hay algo que la hace muy feliz o le genera un conflicto.

No se tarda más de un minuto a completarlo todo y alienta las personas a ser más conscientes de sí mismas y a ser sinceras. Utilizamos un Google Doc que envía los resultados a una ubicación centralizada donde se analizan las medias de los resultados y valores atípicos, para así compararlos con épocas anteriores.

Este, pero, tan sólo es un ejemplo. Cada empresa tiene que encontrar su sistema o metodología personalizada que se adapte a las particularidades del equipo.