29
de Septiembre
de
2016
Act.
30
de Septiembre
de
2016
El 70% de los millennials (mil·lennistes) se sienten desconectados de las empresas por las cuales trabajan. Un dato para reflexionar si tenemos presente que, en 2025 esta generación representará el 75% de los trabajadores del mundo. Su incorporación al ámbito laboral está cambiando las reglas del juego de una manera que las organizaciones tradicionales no siempre entienden ni aprueban.
Perezosos, inestables, capriciosos, exigentes e infieles por naturaleza.The me, me, me generation, tal como los bautizó la revista Time. Esta es la imagen que los millennials arrastran entre el antiguo régimen de la empresa. Y, como todos los tópicos, hay una parte de realidad, pero esto no es motivo para obviar que, generalmente, se trata de un perfil de trabajador creativo, muy relacional y conocedor de primera mano de las nuevas tecnologías. Unas calidades que las organizaciones no pueden dejar escapar.
Las empresas necesitan atraer y gestionar el talento millennial y, no, no todo se reduce a instalar un sala de ping-pong en la oficina.
Prepara un plan de futuro
Sí, es cierto. La generación del milenio tiene problemas de concentración y, en general, los cuesta trabajar en proyectos a largo plazo. Pero no quiere decir que no piensen en el futuro. De hecho, buena parte de los miembros de esta generación necesitan la respuesta a una sola pregunta: "por qué tienen que trabajar por esta empresa?". En la respuesta, el millennial espera saber como la organización lo ayudará a aprender, crecer y desarrollarse en su carrera. En definitiva, espera un plan que lo anime.
El dinero importan, hasta cierto punto
Los aumentos salariales también son una buena fórmula de motivación para los millennials o mil·lennistes, pero tienen un efecto gaseosa que, además, tiene un límite. Los estudios demuestran que cuando los ingresos de una familia llegan a los 75.000 dólares anuales, desaparece la sensación de mejora del bienestar. En cambio, las concesiones a la flexibilidad en el trabajo y la creación de proyectos en los cuales puedan desarrollar sus habilidades ayudan a involucrarlos y retenerlos.
Promueve el uso de la tecnología
Las redes sociales forman parte de la vida de los millennials y, en muchas ocasiones, también son herramientas de comunicación y trabajo. Por eso, la época de las prohibiciones y los cortafuegos ha pasado. Para atraer y retener el talento de esta generación, la empresa tiene que mostrarse activa y actualizada en el uso de tecnología, demostrar que conoce, domina y utiliza las últimas herramientas por el trabajo del día a día. Actualizar la organización jugará a favor de la productividad y del desarrollo profesional de los trabajadores.
Ofrece espacios por la creatividad
Ya hemos dicho que la creatividad es una de las características comunes entre la generación millennial, pero si la organización no la fomenta, puede provocar la frustración y el estancamiento del trabajador. Empresas como Google permiten que sus empleados dediquen el 20% de su tiempo al desarrollo de proyectos propios. Como resultado de esta estrategia han surgido algunos de los productos más rentables por la compañía, como AdSense. Este es sólo un ejemplo de las decenas de empresas que ya permiten que sus trabajadores dediquen su tiempo a la creación de proyectos propios y beneficio tanto de su desarrollo como del de la empresa.
Cambia el rol de la cabeza por el de tutor
Las organizaciones tienen que cambiar para atraer el talento millennial, pero un cambio teórico no sirve sin un cambio en las personas. La figura de la cabeza de "ordeno y mando" ha quedado desfasada. La generación millennial rechaza la figura tradicional de la cabeza. En cambio, valoran la figura del tutor/ coach. Un superior capaz de entender sus necesidades, de guiarlo durante su crecimiento profesional y de valorarlo en el ámbito personal y profesional. Porque la frontera entre trabajo y vida personal también es difundida por esta generación. Todo es vida.
Perezosos, inestables, capriciosos, exigentes e infieles por naturaleza.The me, me, me generation, tal como los bautizó la revista Time. Esta es la imagen que los millennials arrastran entre el antiguo régimen de la empresa. Y, como todos los tópicos, hay una parte de realidad, pero esto no es motivo para obviar que, generalmente, se trata de un perfil de trabajador creativo, muy relacional y conocedor de primera mano de las nuevas tecnologías. Unas calidades que las organizaciones no pueden dejar escapar.
Las empresas necesitan atraer y gestionar el talento millennial y, no, no todo se reduce a instalar un sala de ping-pong en la oficina.
Prepara un plan de futuro
Sí, es cierto. La generación del milenio tiene problemas de concentración y, en general, los cuesta trabajar en proyectos a largo plazo. Pero no quiere decir que no piensen en el futuro. De hecho, buena parte de los miembros de esta generación necesitan la respuesta a una sola pregunta: "por qué tienen que trabajar por esta empresa?". En la respuesta, el millennial espera saber como la organización lo ayudará a aprender, crecer y desarrollarse en su carrera. En definitiva, espera un plan que lo anime.
El dinero importan, hasta cierto punto
Los aumentos salariales también son una buena fórmula de motivación para los millennials o mil·lennistes, pero tienen un efecto gaseosa que, además, tiene un límite. Los estudios demuestran que cuando los ingresos de una familia llegan a los 75.000 dólares anuales, desaparece la sensación de mejora del bienestar. En cambio, las concesiones a la flexibilidad en el trabajo y la creación de proyectos en los cuales puedan desarrollar sus habilidades ayudan a involucrarlos y retenerlos.
Promueve el uso de la tecnología
Las redes sociales forman parte de la vida de los millennials y, en muchas ocasiones, también son herramientas de comunicación y trabajo. Por eso, la época de las prohibiciones y los cortafuegos ha pasado. Para atraer y retener el talento de esta generación, la empresa tiene que mostrarse activa y actualizada en el uso de tecnología, demostrar que conoce, domina y utiliza las últimas herramientas por el trabajo del día a día. Actualizar la organización jugará a favor de la productividad y del desarrollo profesional de los trabajadores.
Ofrece espacios por la creatividad
Ya hemos dicho que la creatividad es una de las características comunes entre la generación millennial, pero si la organización no la fomenta, puede provocar la frustración y el estancamiento del trabajador. Empresas como Google permiten que sus empleados dediquen el 20% de su tiempo al desarrollo de proyectos propios. Como resultado de esta estrategia han surgido algunos de los productos más rentables por la compañía, como AdSense. Este es sólo un ejemplo de las decenas de empresas que ya permiten que sus trabajadores dediquen su tiempo a la creación de proyectos propios y beneficio tanto de su desarrollo como del de la empresa.
Cambia el rol de la cabeza por el de tutor
Las organizaciones tienen que cambiar para atraer el talento millennial, pero un cambio teórico no sirve sin un cambio en las personas. La figura de la cabeza de "ordeno y mando" ha quedado desfasada. La generación millennial rechaza la figura tradicional de la cabeza. En cambio, valoran la figura del tutor/ coach. Un superior capaz de entender sus necesidades, de guiarlo durante su crecimiento profesional y de valorarlo en el ámbito personal y profesional. Porque la frontera entre trabajo y vida personal también es difundida por esta generación. Todo es vida.