A buen seguro que, en algún momento de su trayectoria profesional, cualquier actuario ha tenido que responder preguntas cómo: Qué es un actuario? Qué hace exactamente un actuario? Y bien es verdad que, a menudo, después de explicaciones diversas y variadas, nos quedamos con la frustrante sensación que no nos han entendido, seguramente porque no nos hemos explicado bien, y que no hemos contribuido al conocimiento y la divulgación de nuestra actividad.
A pesar de que durante los últimos años ha crecido considerablemente la figura del actuario, con una demanda cada vez más grande de profesionales especializados en ciencia actuarial, la sociedad no acostumbra a conocer las habilidades, las responsabilidades y los campos de actuación que tiene, todo y el marcado carácter social que implica esta profesión.
Hay diferentes respuestas a la pregunta qué es un actuario, aunque hay consenso entre todo el colectivo que el actuario es un profesional experto en la gestión de riesgos que contribuye a la estabilidad financiera de las personas, las empresas y de la sociedad en general.
La formación de un actuario incluye un amplio espectro de materias y ciencias interrelacionadas, como la probabilidad y la estadística, las matemáticas, las finanzas, la economía y el derecho, cosa que abre un abanico infinito de oportunidades tanto en cuanto a los sectores en que desarrolla la actividad profesional como las funciones que ejerce.
De hecho, al principio, la actividad del actuario se asociaba estrictamente al mundo asegurador y financiero. Aun así, hoy en día, la gestión de riesgos es uno de los puntos fundamentales al si de las organizaciones, cosa que ha hecho del actuario un profesional clave en cualquier tipo de entidad.
El actuario es un profesional experto en la gestión de riesgos que contribuye a la estabilidad financiera de personas, empresas y sociedad
Una vez aceptado que un actuario es un experto en riesgos, la cuestión es: Qué hace exactamente un actuario? Cómo se traduce todo esto a la vida cotidiana? Y, el más importante, cuál es la aportación de la profesión actuarial a la sociedad?
Aunque se hace difícil enumerar las tareas concretas que puede desarrollar un actuario, los principales campos de actividad y las funciones que puede ejercer son los siguientes:
- En el sector asegurador, su "hábitat natural", el actuario es el encargado de determinar la prima que se tiene que satisfacer para cada tipo de seguro teniendo en cuenta las características del riesgo que se asegura. Concretamente, es el responsable de calcular la prima necesaria y suficiente porque, con la recaudación de las primas de todos los asegurados y la aplicación del principio de solidaridad, las entidades aseguradoras dispongan del dinero suficiente para pagar todos los siniestros y hacer frente a todos los compromisos que han asumido. En definitiva, se trata de hacer una estimación, mediante el uso de la probabilidad y las finanzas, del número de siniestros que tendré que pagar y el coste mediano de estos siniestros.
La responsabilidad del actuario en el cálculo de las reservas a las entidades aseguradoras es más relevante y, al mismo tiempo, más desconocida. Si tenemos en cuenta que en el sector asegurador se invierte el proceso productivo convencional, es decir, que el cliente anticipa el pago de la prima para percibir la indemnización en el supuesto de que se produzca un siniestro, el actuario actúa como garante y determina la cantidad de primas percibidas anticipadamente que las entidades tienen que reservar en cada momento para hacer frente a los siniestros que se puedan producir en el futuro.
En este sentido, hay que destacar que el equilibrio entre el conocimiento técnico y actuarial y el conocimiento del negocio asegurador convierte el actuario en un profesional idóneo para el desarrollo de funciones directivas dentro de las entidades aseguradoras.
En el mundo de la empresa, el actuario es un elemento clave para gestionar de manera adecuada los riesgos. La correcta administración de riesgos, que el actuario ayuda a identificar, cuantificar y controlar, permitirá que la empresa planifique el futuro y se proteja mejor ante las pérdidas, esperadas o inesperadas.
En cuanto a las pensiones, públicas y privadas, los actuariostienen, otendrían que tener, un papel protagonista. Sus habilidades en el manejo de la probabilidad y las finanzas, como también el conocimiento del seguro, los otorga la capacidad y la autoridad para proponer modelos sostenibles de previsión que, con un enfoque objetivo y a largo plazo, permitan un equilibrio entre los ingresos y los gastos para poder apuntar o advertir de cualquier desviación que pueda hacer peligrar el sistema. La intervención de la ciencia actuarial se hace, hoy en día, más urgente, en vista de todas las previsiones de envejecimiento de la población. Esta reflexión también se podría aplicar al ámbito sanitario, otro de los pilares del Estado del bienestar.
- En la esfera financiera, la aportación más relevante que puede hacer se centra en la evaluación y la optimización de las estrategias de inversión y de financiación y en el análisis de la viabilidad de las estrategias de rentabilidad y minimización de riesgos.
Una profesión de futuro?
Nos encontramos con una profesión reconocida en su entorno y con un potencial importante de desarrollo, pero con un gran desconocimiento por parte del público en general. La situación actual se caracteriza por:
- Un incremento muy importante de la demanda de actuarios en todo el mundo, motivado por: la profesionalización de las técnicas para la gestión de riesgos (especialmente en el sector financiero: banca y seguros); la introducción de técnicas de gestión de riesgos a las grandes empresas industriales y de servicios (Enterprise Risk Management – BALDÍO); los estudios de viabilidad de los sistemas públicos y privados de pensiones.
- El Colegio d´Actuarios de Cataluña tiene más de 500 actuarios colegiados (se estima que, al mercado,trabajan más 1.000 actuarios) que dan servicio en los principales bancos y aseguradoras del mercado, a importantes delegaciones multinacionales y, también, a un gran número de entidades del ámbito de la salud, mutuas y mutualidades.
- Un proceso disruptiu tanto en el sector financiero como en otros muchos sectores, motivado por:
- Clientes: más exigentes, con necesidades y expectativas cambiantes que requieren personalización.
- Tecnología: transformación y digitalización (Big Data, procesos digitalizados orientados al cliente).
- Distribución: focalización en la venta mediante un asesoramiento completo, que proporciona una oferta integral y omnicanal.
- Factores económicos: reducción de los márgenes, tipos de interés bajos, más transparencia, presión sobre los precios e irrupción de la economía colaborativa.
- Factores sociales: mil·lennista (75% de la población laboral el 2025), más preocupación por la salud, envejecimiento de la población y menos apoyo familiar para la atención a la gente mayor.
Ante esta situación, la profesión actuarial tiene una oportunidad clara para participar activamente en el desarrollo de los cambios necesarios, gracias a la formación, el conocimiento del negocio y la capacidad de análisis que tiene y que le permite:
- Convertir la información en conocimiento de valor (big data y analytics ) y, en consecuencia, diseñar una oferta personalizada y mejorar la experiencia del cliente.
- Simplificar las operaciones y obtener el máximo rendimiento de las tecnologías, mediante la definición de modelos ágiles con la participación de los consumidores.