Escoger qué quieres ser

14 de Marzo de 2018

Este 14 de marzo se inicia una nueva edición del Salón de la Enseñanza, que mostrará la oferta de grado, y el siguiente sábado su equivalente en la oferta de posgrado, el Salón Futura. Tanto por la experiencia personal, con hijos en edad de escoger su futuro profesional, como escalera profesional, como directora de la UPF Barcelona School of Management, he acumulado en las últimas semanas algunas reflexiones que recojo a guisa de inspiración por aquellos que se encuentran en este momento vital de la vida.

En primer lugar es importante hacer aquello que genere ilusión. Porque en aquello con que disfrutamosponemos más esfuerzo y ganas, y esto genera más posibilidad de tener éxito posterior. Éxito. Qué éxito? Aquello que queremos llegar a ser o aquello que queremos llegar a hacer? La medida del éxito ha cambiado mucho en las nuevas generaciones. Ahora los jóvenes buscan espacios y entornos que los permita desarrollar su proyecto personal y profesional. Los preocupa el impacto y la transformación más que el éxito personal. Las universidades y escuelas se están adaptando a este cambio poniendo a disposición de los alumnos plataformas que permiten el desarrollo de proyectos reales y de alto impacto.

Por otro lado las decisiones sobre el estudio a realizar no son definitivas para dibujar el futuro profesional. Si uno reconoce el error de elección, siempre estará a tiempo de cambiar. En un contexto donde escasea la cultura del error es importante dejar este margen de rectificación que, al fin y al cabo, es un aprendizaje más.

Las buenas universidades ofrecen grados generalistas precisamente porque en esta etapa es importante tener un conocimiento completo del ámbito de estudio. La especialización ya vendrá después. Los grados tienen que dar un espectro amplio de conocimiento, mejor cuanto más transversal y que permita aproximarse a otros ámbitos de conocimiento a ser posible. Hay entornos que propician una elección de optativas o personalización mucho más rica que otros, más allá del área de conocimiento escogida.

Los másteres y posgrados ayudan a preparar los estudiantes para el mundo profesional o, para los quienes ya tienen experiencia, a desarrollarse en los diferentes momentos de la carrera profesional. Aun así las empresas buscan personas con mirada global, capaces de entender que su área de expertesa tiene conexiones con el resto de áreas de la empresa y, sobre todo, de entender el mundo. Los entornos diversos son ideales para el aprendizaje. Buscar entornos donde se pueda encontrar personas de diferentes procedencias, intereses y áreas de conocimiento y se creen las condiciones para interactuar con ellas es de un enriquecimiento personal muy valioso para el crecimiento personal y desarrollar las competencias que las empresas requieren. No es casual, a guisa de ejemplo, que esta semana hayamos organizado en nuestra escuela el Laberinto Festival, un conjunto de actividades culturales y humanísticas destinadas a entender el mundo del management desde una mirada diferente: la literatura, el arte, la música, el cine, etc.

Hay un aspecto de género que no querría obviar. Hace falta que los hombres exploren profesiones tradicionalmente femeninas. Y que las mujeres rompan con los esquemas heredados y osen a escoger aquello en que piensan que podrán aportar valor, aunque sean ámbitos históricamente reservados a hombres.

Respecto de las universidades como sistema, la investigación trae conocimiento y talento, y tiene un impacto directo en la calidad de la docencia. No hay una cosa sin la otra. Los rankings internacionales, muy interpretados, dan información muy valiosa. Además, las universidades tienen que tener un grado alto de internacionalización porque generan más oportunidades de crear un ecosistema global para el alumno.

Finalmente, en el desarrollo de la carrera es tan importante definir los objetivos personales como estar abierto a las oportunidades imprevistas y que quizás traen a caminos nunca antes explorados. Incluso que no tienen nada que ver con aquello que en determinado momento de la vida parecía más importante, como la elección del grado.