En el actual escenario de
expansión económica, numerosos empresarios se plantean la posibilidad de realizar
cambios en la composición de su accionariado, aprovechando que
existen interesantes oportunidades de compra y de venta a los mercados nacional e internacional.
En algunos casos se producen cambios generacionales dentro de la empresa familiar que requieren de una planificación previa con objeto de garantizar la continuidad del negocio evitando generar tensiones en el seno de la familia. Es importante mencionar que gran parte de las empresas que no realizan una correcta planificación en el cambio generacional acaban desapareciendo.
Y si
hablamos de una tercera generación, solamente una minoría de las empresas permanece.
Por otro lado, hay empresarios que consideran que es momento de vender su negocio. Estos acuden al mercado nacional o internacional buscando empresas del mismo sector que puedan aprovechar la labor realizada por la compañía, valorando aspectos como la implantación, la cartera de clientes y la red de distribución, entre otras.
A través de despachos de corporate
financio internacionales, en su mayoría europeos, también están llegando empresarios extranjeros en busca de empresas españolas con las cuales asociarse, o bien, adquirir íntegramente. Del mismo modo que
se ha producido en el sector inmobiliario, hay
empresarios extranjeros que buscan entrar en un momento de bajos precios adquiriendo plataformas a través de las cuales expandirse internacionalmente.
En muchos casos
se buscan empresas españolas que tengan iniciada la comercialización internacional para, así, contribuir a su desarrollo. En sentido inverso, se está notando un interés creciente de empresarios españoles que necesitan ganar músculo, pues entienden que con el crecimiento orgánico de sus empresas no lo conseguirán en poco tiempo y por eso se plantean abiertamente la adquisición otras empresas, ya sea de su mismo sector o de sectores complementarios.
En algunos casos se busca un crecimiento manteniendo la propiedad y, en otros, se aprovechan las sinergias de ambas compañías para generar una alianza entre los respectivos empresarios e iniciar una nueva etapa al mercado global.
Finalmente, nos encontramos con empresarios españoles que buscan un socio financiero para culminar su proceso de expansión. A estas operaciones suelen acudir
Private Equities especializadas, incorporándose en la gestión de la compañía y aportando una profesionalización de la misma. La permanencia
de estos socios financieros suele estar limitada a periodos de entre cinco y siete años, siempre, asegurando su salida después del relanzamiento de la actividad.
Las principales claves del éxito de este tipo de operaciones pasan por una buena selección de las
oportunidades de compra, una
adecuada valoración económico-financiera de la empresa y un análisis detallado de las
implicaciones fiscales de la operación.