El día de la marmota

28 de Octubre de 2020
Act. 03 de Noviembre de 2020

La Anoia es una comarca con un fuerte bagaje empresarial, con ADN emprendedor y de empresa de toda la vida: una comarca muy bien situada geográficamente, con un buen nivel de calidad de vida, que la hace atractiva y con potencial. Un territorio que si bien agrupa tres zonas diferenciadas y con realidades diferentes, Alta Anoia, Conca d'Òdena y Anoia Sur, lo dota de más riqueza. Lo más curioso de todo es que todos los activos y esta idiosincrasia industrial, a pesar de la trayectoria y reputación que tiene la comarca gracias a su tejido empresarial, tenemos pendiente la mejora de las infraestructuras y comunicaciones del territorio desde hace muchos años; y es un tema que preocupa mucho al empresariado de la Anoia porque dificulta el desarrollo económico de la comarca. Pero no sólo las empresas lo sufren: también preocupa a la población en general porque no nos permite avanzar como territorio.

 

Desde la Unión Empresarial de la Anoia hace tiempo que insistimos en la necesidad de encarar estas mejoras tan necesarias y este año, a partir de un trabajo de campo al lado de la Comisión de Urbanismo y Movilidad de la Anoia (CUMA), hemos recogido y trabajado las demandas en temas de infraestructuras y movilidad de centenares de empresarios, asociaciones de polígonos, entidades y agentes socioeconómicos, la ciudadanía en general, y también hemos ido a conocer la visión y opinión de varios expertos en la temática.

Todo este trabajo realizado a lo largo de más de un año, las opiniones, las conclusiones y también algunas ideas de futuro, las hemos recogido en un documento, el Libro Blanco de Infraestructuras y Movilidad de la Anoia, donde agradezco personalmente las más de 1.400 personas que han participado y colaborado para que sea posible. Un informe que presentamos este miércoles en el marco del IV Foro Empresarial de la Anoia.

 



La gran tarea que hemos hecho desde la entidad que presido nos ha hecho ver la necesidad imperiosa que tenemos en la Anoia de coger y tomar nota de todas las demandas que nos han hecho llegar, trabajarlas junto a los agentes implicados, y sobre todo sacarlas adelante con consenso ante cualquier organismo. Hace falta unidad de comarca para defender lo que queremos y creemos importante para ser un territorio fuerte, competitivo, atractivo y con calidad de vida. Y precisamente, esta apuesta conjunta, este consenso entre los municipios de la comarca, es lo que tenemos que trabajar primero. Juntos tenemos que decidir qué queremos como territorio, como queremos que sea la Anoia en un futuro, y qué estamos dispuestos a ofrecer pero también a renunciar.

Es un ejercicio que la comarca tiene que hacer conjuntamente y el paso previo para planificar la mejor estrategia para avanzar en infraestructuras y movilidad porque somos una comarca que está llena de oportunidades, y tenemos que trabajar para no perder ninguna. Es cierto que se hacen alianzas y coordinaciones entre municipios vecinos en casos concretos, pero la Anoia necesita una visión global de comarca, más general y más coordinada entre todos. Una planificación que señale las mejoras en la red viaria para estar más conectados, que ofrezca un servicio de transporte público eficiente, sostenible e inclusivo que permita la movilidad de los trabajadores y de la población en general, que la conexión de fibra óptica llegue a todos los puntos del territorio y la tecnología 5G esté presente en las empresas, que identifique las zonas industriales más óptimas para ver crecer a las empresas de casa y poder recibir las nuevas inversiones, etc… Porque esta es la clave: si el territorio es competitivo porque está dotado de buenas infraestructuras, buenas carreteras y buena movilidad, las empresas también lo serán.

A veces nos parece que en la Anoia vivimos atrapados en el tiempo: en el Día de la Marmota. No lo digo ni lo escribo por decir, sino que parece que repetimos discursos y remarcamos situaciones que no avanzan, como la película Atrapado en el tiempo o un déjà-vu interminable como la serie alemana Dark. Nosotros llevamos años encallados en una cuestión que como territorio necesitamos resolver. Arrastramos un problema endémico que es notorio y palpable dentro y fuera de la comarca y que parece encontrarse en un callejón sin salida: las infraestructuras, la movilidad y el suelo industrial. Las empresas y los ciudadanos necesitamos salir de este bucle para tener una comarca más competitiva para trabajar y para vivir.

"Traemos años encallados en una cuestión que como territorio necesitamos resolver. Arrastramos un problema endémico que es notorio y palpable dentro y fuera de la comarca: las infraestructuras, la movilidad y el suelo industrial"

Soy de la Anoia, mi empresa está ubicada en la comarca, y presido una entidad que vela, trabaja y se compromete por el tejido empresarial, por la sociedad y el territorio. Creo en la comarca y es momento que todos creamos, que nos sintamos de la Anoia. Sólo así avanzaremos, generaremos puestos de trabajo, retendremos y atraeremos talento, seremos productivos y ambiciosos, atractivos a ojos de las nuevas inversiones industriales, pero también ofreceremos un turismo de calidad, tranquilo, y nos convertiremos en una comarca con calidad de vida, conectada, eficiente y sostenible; y decidir si queremos seguir mirándonos los pies o mirar adelante: hay dos futuros, el que nos espera o el que podemos hacer juntos.

De todos depende el futuro del territorio y cómo queremos que sea de grande. Hemos trabajado todos los agentes sociales, económicos y políticos juntos para despertarnos del Día de la Marmota porque será entonces cuando tendremos la comarca que hemos soñado.