Todos sabemos que hay que fortalecer nuestras empresas para hacerlas más competitivas en un entorno donde la globalidad es un hecho incuestionable. Pero pocas se centran a potenciar y a dotar en habilidades sus mandos y colaboradores. La empresa que hoy es competitiva es la que tiene un modelo formativo orientado a las necesitas de los profesionales que las integran, ligado a la estrategia de negocio.
Los últimos años hemos podido coger como la necesidad de internacionalización y apertura de nuevos mercados estaba vinculada a la necesidad de mejorar los conocimientos de idiomas de nuestros trabajadores, quizás la asignatura pendiente en cualquier entorno profesional.
Desde hace unos años, a la hora de realizar el reclutamiento de personas con idiomas para integrarlas en departamentos de exportación, compras o cualquier otro con un componente internacional, nos encontramos con graves dificultades para conseguir candidaturas que aporten el mínimo nivel exigible y, no hay que decirlo, cuando buscamos personas poliglotes con conocimientos de dos o más lenguasextranjeras.
La importancia de la educación desde la infancia es de vital importancia y el diseño del currículum formativo en idiomas desde la escuela hasta la universidad, con la posibilidad que nuestros jóvenes estudien y se formen en otros países, será un factor que nos permitirá tener buenas oportunidades en el futuro.
Qué tenemos que hacer desde la pyme ante estas carencias del mercado de trabajo? Crear programasformativos propios con el objetivo de fortalecer nuestro perfil y ganar en oportunidades. Si perdemos de vista que tomar conciencia que la formación y el desarrollo son la mejor inversión, también perderemos de vista una de las principales reglas de juego en un mercado cada vez más exigente.