Etnógrafo digital

Juegos de Twitter

09 de Enero de 2020
Josep Maria Ganyet | VIA Empresa

En la película Juegos de Guerra (War Games, John Badham, 1983) un joven hacker (Matthew Broderick) consigue en plena guerra fría infiltrarse en los sistemas de defensa de los EE.UU. y lanzar un programa de simulación de un juego de "Guerra Mundial Termonuclear" que casi provoca la tercera guerra mundial.

 

La película, que aguanta muy bien, plantea los riesgos que comporta el hecho de dejar que según qué decisiones —matar alguien o empezar una guerra— las tomen de manera no supervisada las máquinas en base a algoritmos de inteligencia artificial.

Volvemos a 2020. Hoy internet ya no es aquella internet incipiente de 1983 a la que nos conectábamos con módems tan visibles como audibles. Y tampoco hay que ser un experto hacker con conocimientos avanzados de sistemas por hackear un sistema.

 

"Puede el Presidente de los EE.UU. hacer una declaración de guerra por Twitter? Rotundamente sí y además ya ha pasado"

El pasado domingo la prolífica cuenta de @realDonalTrump tuiteaba: "Sirvan estas publicaciones [tuits] como notificación al Congreso de los EE.UU. en caso de que Irán ataque un ciudadano o un objetivo de los EE.UU., los EE.UU. responderán de manera rápida, total y quizás desproporcionadamente. Esta notificación legal no es requerida, pero no obstante os la doy!" (La traducción es fiel a la mala puntuación del tuit original, a pesar de que el espíritu y el tono amenazantes quedan claros tanto en el uno como en la otra). El detalle es que quién tuita esto, además de ser un troll en la red y un vendedor de pisos en la vida real, es también el Comandante en Jefe del ejército más potente del mundo.

Puede el Presidente de los EE.UU. hacer una declaración de guerra por Twitter? Rotundamente sí y además ya ha pasado. Además de la actual escalada con Irán que no sabemos donde nos llevará, encontramos un precedente en 2017 cuando en una serie de amenazas a Corea del Norte tuiteó que el país asiático "no estaría demasiado más tiempo" y que su botón nuclear "era más gordo que el de Kim Jong-Un y que además, funcionaba". El ministro de exteriores de la República se tomó el contenido de los tuits como una declaración de guerra.

El tuit de domingo donde Trump amenazaba a Irán despertó las habituales reacciones de reprobación de sus detractores, de exaltación de sus seguidores y de alegría al algoritmo de Twitter por las interacciones de unos y otros. Pero de entre todas las reacciones destacaba la del House Foreign Affairs Committee que recomendaban al Presidente la lectura de la War Powers Act (50 Uno.S.C. 1541–1548) de 1973 que limita el poder de la Casa Blanca a la hora de enviar el ejército a un conflicto armado. Literalmente el tuit decía "Sirva esta publicación [tuit] como recordatorio que los poderes de guerra residen en el Congreso bajo la Constitución de los Estados Unidos. Y que usted tendría que leer la War Powers Act. Y que usted no es un dictador".

"El 2020 es muy diferente de aquel lejano 1983, pero hay una cosa que no ha cambiado: todavía da más miedo la estupidez natural que la inteligencia artificial"

En Juegosde Guerra, al final, la inteligencia artificial del ordenador después de evaluar todos los posibles escenarios de una guerra total, llegaba a la conclusión que los juegos que guerra son un juego extraño donde el único movimiento que te lleva a la victoria es no jugar.

El 2020 es muy diferente de aquel lejano 1983, pero hay una cosa que no ha cambiado: todavía da más miedo la estupidez natural que la inteligencia artificial.