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Profesor del departamento de Finanzas de Eada Business School

El gobierno español y la OPA sobre el Sabadell: un juego de tensiones y oportunidades

26 de Enero de 2025
Joan Tarradellas

En un escenario financiero global cada vez más competitivo, las grandes operaciones de consolidación bancaria han pasado a convertirse en el epicentro de la lucha por el liderazgo en el sector. La oferta pública de adquisición (OPA) presentada por el BBVA sobre Banc Sabadell no es la excepción. Sin embargo, detrás de este movimiento empresarial que pretende remodelar el panorama bancario español, se esconde un desafío crucial: el posible veto del gobierno español, el cual, aunque no tiene poder directo sobre la OPA, podría desbaratar cualquier posibilidad de fusión. Un bloqueo que no solo podría cambiar el curso de la transacción, sino que también podría tener repercusiones profundas en la economía del país.

 

El poder del gobierno: ¿un pilar de estabilidad o un obstáculo?

Bajo el marco legal vigente, específicamente la Ley 10/2014 de Ordenación, Supervisión y Solvencia de Entidades de Crédito, el gobierno español posee una autoridad considerable en la supervisión de fusiones bancarias. Si bien no puede intervenir directamente en la OPA en sí, tiene la capacidad de vetar la fusión una vez consumada la adquisición. Esta facultad de bloqueo se ejerce con el fin de salvaguardar aspectos clave como la competencia, la estabilidad financiera y el interés público. En un país como España, con un sistema bancario altamente interconectado, cualquier movimiento que altere la estructura del sector podría tener consecuencias de largo alcance. El ejecutivo no solo se enfrenta a un reto legal, sino también a una encrucijada política y económica de gran calado.

Sinergias y ahorros: ¿El Dorado financiero o una utopía?

Uno de los principales atractivos de la fusión entre BBVA y Banco Sabadell radica en las sinergias proyectadas. Se espera que la unión de estas dos entidades financieras genere un ahorro anual de 850 millones de euros, desglosados en varios frentes. En el ámbito administrativo y tecnológico, se estima una reducción de costes de 450 millones de euros. Por otro lado, los gastos de personal podrían bajar en 300 millones de euros, mientras que los costes financieros se verían reducidos en otros 100 millones.

 

"Las reestructuraciones iniciales, aunque necesarias, son costosas y podrían diluir parte de los beneficios esperados en los primeros años"

Estos números no son simples proyecciones; representan el corazón de la operación, el factor que podría transformar esta OPA en un éxito rotundo. Sin embargo, la fusión no está exenta de desafíos. En primer lugar, las reestructuraciones iniciales, aunque necesarias, son costosas y podrían diluir parte de los beneficios esperados en los primeros años. Estos ahorros, que representan un 34% de la base de costes combinada de ambas entidades, se materializarían plenamente en un horizonte de tres a cinco años tras la fusión, alcanzando su máximo potencial en 2026. 

Rentabilidad a largo plazo: ¿inversión atractiva o riesgo financiero?

Uno de los factores determinantes para evaluar la viabilidad de esta operación es la Tasa Interna de Rentabilidad (TIR), que se configura como la herramienta clave para medir la rentabilidad de la inversión en función de los flujos de caja futuros. Examinemos dos posibles escenarios de la operación.

  • Escenario 1: fusión y sinergias. Haciendo una estimación de este escenario con la poca información disponible, con la fusión consumada y las sinergias plenamente realizadas, los flujos de caja totales serían la suma de los flujos de caja del propio Banco Sabadell más las sinergias. Este escenario generaría una TIR estimada del 11.5%, superando significativamente el coste de capital promedio del sector bancario.
  • Escenario 2: veto del gobierno español. Sin fusión hay OPA, pero no hay sinergias. Por otro lado, en un escenario sin fusión, donde las sinergias no se materializan, el precio pagado por la operación tendrá únicamente como recompensa la propia generación de caja del Banc Sabadell. El altísimo precio que se prevé pagar por la OPA -y que podría subir aún más en los próximos días- hace que la TIR, ahora sin sinergias, caiga a un modestísimo 3,5%. Esta cifra apenas supera la rentabilidad del bono alemán, lo que convierte la OPA en una opción muy poco atractiva para los inversores. Es un recordatorio claro de que los beneficios de la fusión no son solo un capricho, sino una necesidad si se quiere que esta operación sea financieramente viable.

El gobierno español: el guardián del futuro mapa bancario

Con la presentación de los resultados de 2024 a la vuelta de la esquina, todos los ojos están puestos en las decisiones que tomará el ejecutivo central. Sin las sinergias esperadas, la OPA podría perder su atractivo financiero, llevando a la fusión a un callejón sin salida. No es solo una cuestión de números; es un acto de equilibrio delicado que podría definir el futuro del sector bancario en España. En manos del gobierno español, la pregunta es clara: ¿aprobación de la fusión o veto?