consejero de carreras profesionales a EADA

La dictadura del currículum

28 de Julio de 2013
"Es imprescindible que aporte experiencia previa en el desarrollo de funciones similares." Se los suena? Es muy corriente encontrar este requisito en muchos de los anuncios que se publican a la actualidad. Las empresas acusan el rigor de la actual crisis económica el que hace que traten de conseguir resultados inmediatos que los permita suavizar los efectos de la presente coyuntura. Por eso, el tiempo es crucial.

Las políticas de reclutamiento y selección de personal se concentran, ahora más que nunca, al encontrar en el candidato idóneo en el menor tiempo posible, o dedo de otro modo, aquel que pueda garantizar resultados desde prácticamente el minuto uno de partido.

Es por eso que el reclutador a menudo pone el foco de su evaluación enlaexperiencia aportada porelaspirante, que se interpreta como sinónimo de un ágil desempeño, o bien en el conocimiento de mercado, que también se sitúa en el apartado de "recomendable "si esperamos frutos inmediatos, para poner un par de ejemplos.

Pero, ¿qué pasa cuando lo/la candidato/a se postula a posiciones o vacantes para las cuales no cuenta con una experiencia apreciable, en términos de similitud o analogía? Pues que desafortunadamente corre un claro riesgo que se le descarte sin posibilidad alguna de exponer sus calidades o capacidades en su posible ocupación. Son los efectos de la dictadura del currículum, bajo la cual y en mi opinión, la trayectoria anterior condiciona en exceso nuestro futuro profesional.

Si es usted un candidato y no cumple con la primera frase del presente escrito, se tendrá que esforzar a nutrir su currículum con información que denote conocimiento y expertise más allá de su mercado de referencia. Tendrá que hacer notar las competencias que puedan ser transferibles o extrapolables a un nuevo y alternativo ámbito profesional.

Si en cambio es usted un reclutador, os animo a pensar de manera diferente, a revisar y ampliar sus criterios de evaluación y a otorgar un mayor valor al que las personas pueden llegar a hacer, y quizás, por qué no, algo menos al que estas han hecho. Es posible que así llegue a sus manos la brillantez y talento que su empresa necesita.

La experiencia en una business school me ha servido para tomar todavía más conciencia de la importancia que tienen las habilidades y capacidades en las personas que tienen que liderar en un futuro nuestras empresas, además de un conveniente código ético y moral. Y los dos son aspectos que, probablemente compartirá conmigo, no se exponen tan claramente en un currículum, oi?