Empresa, cultura y sociedad digital

Mirando el 2019 por el agujero de la cerradura

04 de Enero de 2019
Genís Roca

Sube la ética. Bajan los robots.

 

Este 2018 hemos hablado mucho robots y del futuro del trabajo por aquello de si acabarán sustituyéndonos en nuestras tareas, meravellant-nos de todo el que son capaces de hacer y compartiendo vídeos por el Whatsapp donde salen robots que incluso hacen el ridículo mirando de bailar o estarse de pie mientras los molestamos para hacerlos caer.

El 2019 ya dejaremos de preocuparnos tanto de aquello que saben hacer y pondremos más el foco en el algoritmo que decide como lo tienen que hacer. Giraremos la mirada hacia los criterios y las variables que el programador ha tenido en cuenta. Cuando un coche autónomo en una situación de riesgo tenga que decidir si te salva a tú o a una vaca que pasa por allá, será relevante que el programador no sea un creyente hindú que considera que tú eres un pària y en cambio las vacas son sagradas. El coche hará una cosa u otra porque alguien le ha dado un criterio, y en querremos hablar tanto o más que del coche.

 

"El 2019 ya dejaremos de preocuparnos tanto de aquello que saben hacer y pondremos más el foco en el algoritmo que decide como lo tienen que hacer"

 

Sube el blockchain. Baja el Big Data.

Hasta ahora hemos hablado mucho la capacidad de recoger muchos datos, y de qué seríes capaz de hacer con tanto dato. Quien más quien menos presumía de tener mucha información, y los quetenían poca buscaban la manera de tener más.

Este 2019 el foco ya no estará en el volumen sino en la fiabilidad, y definiremos las bibliotecas de datos no tanto por su extensión sino por su calidad. En primer lugar desde un punto ético, sobre si hemos obtenido el dato con mayor o menor conciencia y consentimiento de los implicados. Y en segundo lugar desde un punto de vista técnico, sobre si el dato puede haber sido alterada antes no nos llega a nosotros, y es aquí donde hablaremos muy -todavía más- del blockchain como solución técnica para garantizar la confianza.

Sube el 5G. Baja el 3D.

Nos gustan más los sueños que la realidad, y por eso dejaremos de hablar tanto de la impresión 3D y hablaremos mucho del 5G. La impresión 3D es ya una realidad absoluta, y se ha incorporado con normalidad en muchos procesos industriales y ha modificado de manera muy relevante muchos productos de nuestra vida cotidiana. Por eso ya no es tan fascinando hablar, porque es una conversación que ya no soporta demasiado hacer volar palomos y necesita ser aterrizada a casos de uso concretos y reales, pues ya hay muchos y la conversación acepta pocas especulaciones.

En cambio el 5G es el futuro. No lo veremos operativo a nuestras vidas hasta dentro de unos años, por eso nos fascinará tanto hablar mucho durando todo el 2019. Unos lo harán porque necesitan explicar las bondades a los que toman decisiones, para que las tomen y hagan las apuestas pertinentes por su correcto despliegue. Y otroshablarán mucho porque siempre hay quién disfruta imaginando futuros y hablando, aunque a veces exagere un chico o no acabe de saber muy bien qué pasará.

"El 5G es el futuro, pero no lo veremos operativo a nuestras vidas hasta dentro de unos años"

 

Sube el plan de acción. Baja el plan estratégico.

El plan estratégico ha muerto. Viva el plan de acción.

El más importando no es que has pensado, si no cuánto tardarás a ponerlo en marcha minimizando riesgos. Hay una tendencia imparable a transformar las organizaciones para hacer posible que además de estabilizar procesos sean capaces de impulsar proyectos. Hasta ahora la gestión por procesos y la gestión por proyectos convivían mal, y en cambio ahora necesitamos que lo hagan y se combinen.

Antes hablábamos de "time tono market" para expresar cuánto de tiempo tardes al trasladar una propuesta al mercado, pero ahora el concepto tiene que tener más precisión y hay que hablar de "time tono test". Cuánto de tiempo tardarás a hacer una prueba de tu idea con cliente real? Hay organizaciones acostumbradas a un "time tono market" de un año, que tendrán que espabilar para ser capaces de lograr un "time tono test" de ocho semanas. Y este es un cambio nada sencillo, que tendrá mucha gente ocupada durante este 2019.