Que tu dinero trabajen por tú
08
de Diciembre
de
2014
Las causas de las desigualdades económicas entre la población se deben de a varios factores; uno de ellos tiene que ver con la tipología de ingresos y sus tipos impositivos.
Según un estudio del Congressional Budget Office titulado Trends in the distribution of Household income between 1979 and 2007 del 2007, para entender el origen de estas desigualdades es importante tener en cuenta de qué tipo de ingresos hablamos y cómo se distribuyen. Así, en cuanto a ingresos del trabajo (salarios y pensiones), el 20% de la población con más salario recibe el 50% del total de los ingresos. En cuanto a rentas de capital (dividendos e intereses), se calcula que el 20% de la población más rica recibe hasta el 80% de los intereses y dividendos, mientras que el 95% de los ingresos por ganancias de capital (ganancias por la venta de todo tipo de activos que han subido de valor) corresponden al 20% de la población más rica.
Según la distribución de ingresos anterior, el principal problema no rae en los salarios sino en las ganancias y rentas de capital. La dificultad se acentúa cuando comparamos estas fuentes de yngressos con los impuestos que aplican para cada tipo de renta .
Mientras que los impuestos del IRPF del trabajo superan el 50% del total de la recaudación en España, los impuestos por ganancias y rentas de capital se sitúan siempre por debajo del 30%. Es decir, los impuestos -en su configuración actual- acaban agravando las desigualdades sociales, porque los que más ingresan normalmente lo hacen mediante venta de actius, dividendos e intereses y estos están menos grabados por Hacienda.
El equity crowdfunding o financiación colectiva de inversión es, en este sentido, una vía de acceso para la clase mediana a rentas y ganancias de capital, hasta ahora reservadas a grandes patrimonios. La inversión alternativa permite a los ahorrativos diversificar las fuentes de ingresos a medio y largo plazo, teniendo en cuenta que, al ser ganancias y rentas de capital, están menos grabadas por Hacienda que los ingresos generados por el trabajo.
La inversión en empresas de nueva creación también está fuertemente incentivada por el Estado y las comunidades autónomas por las desgravaciones fiscales (deducciones de entre un 20 y un 50% en las declaraciones del IRPF), una ventaja que hasta el momento sólo aprovechaban los llamados business angels. La inversión alternativa es, además, uno de los activos más rentables. Diferentes estudios revelan que, de media, los inversores de equity crowdfunding obtienen regresos de 2,2 veces el capital invertido en un periodo de 4 años, lo cual es equivalente a una tasa anual (TIRO) superior al 30%.
Por todas estas razones, parte de la solución para paliar las diferencias económicas entre la población radica que se aprenda a ahorrar e invertir mejor y, dentro de lo posible, disponer de una mayor información y visión global de todas las alternativas posibles.
Según un estudio del Congressional Budget Office titulado Trends in the distribution of Household income between 1979 and 2007 del 2007, para entender el origen de estas desigualdades es importante tener en cuenta de qué tipo de ingresos hablamos y cómo se distribuyen. Así, en cuanto a ingresos del trabajo (salarios y pensiones), el 20% de la población con más salario recibe el 50% del total de los ingresos. En cuanto a rentas de capital (dividendos e intereses), se calcula que el 20% de la población más rica recibe hasta el 80% de los intereses y dividendos, mientras que el 95% de los ingresos por ganancias de capital (ganancias por la venta de todo tipo de activos que han subido de valor) corresponden al 20% de la población más rica.
Según la distribución de ingresos anterior, el principal problema no rae en los salarios sino en las ganancias y rentas de capital. La dificultad se acentúa cuando comparamos estas fuentes de yngressos con los impuestos que aplican para cada tipo de renta .
Mientras que los impuestos del IRPF del trabajo superan el 50% del total de la recaudación en España, los impuestos por ganancias y rentas de capital se sitúan siempre por debajo del 30%. Es decir, los impuestos -en su configuración actual- acaban agravando las desigualdades sociales, porque los que más ingresan normalmente lo hacen mediante venta de actius, dividendos e intereses y estos están menos grabados por Hacienda.
El equity crowdfunding o financiación colectiva de inversión es, en este sentido, una vía de acceso para la clase mediana a rentas y ganancias de capital, hasta ahora reservadas a grandes patrimonios. La inversión alternativa permite a los ahorrativos diversificar las fuentes de ingresos a medio y largo plazo, teniendo en cuenta que, al ser ganancias y rentas de capital, están menos grabadas por Hacienda que los ingresos generados por el trabajo.
La inversión en empresas de nueva creación también está fuertemente incentivada por el Estado y las comunidades autónomas por las desgravaciones fiscales (deducciones de entre un 20 y un 50% en las declaraciones del IRPF), una ventaja que hasta el momento sólo aprovechaban los llamados business angels. La inversión alternativa es, además, uno de los activos más rentables. Diferentes estudios revelan que, de media, los inversores de equity crowdfunding obtienen regresos de 2,2 veces el capital invertido en un periodo de 4 años, lo cual es equivalente a una tasa anual (TIRO) superior al 30%.
Por todas estas razones, parte de la solución para paliar las diferencias económicas entre la población radica que se aprenda a ahorrar e invertir mejor y, dentro de lo posible, disponer de una mayor información y visión global de todas las alternativas posibles.