La actividad económica no para nunca y pide tomar decisiones continuadamente. Y es importante aprovechar el periodo electoral para recordar y actualizar las necesidades y propuestas que tenemos los empresarios. Con convocatoria electoral en el horizonte, desde Foment del Treball hemos presentado una serie de propuestas de tipo económico y social para que el próximo Govern conozca las necesidades y horizontes del tejido empresarial catalán. Hemos hecho públicas un total de 465 propuestas. Podríamos hacer más. En todo caso, lo que reclamamos son actuaciones concretas para conseguir una economía más robusta, con una fiscalidad más competitiva y poner las bases para un ecosistema económico positivo y dinámico.
Estas iniciativas quieren construir un tablero de juego que respete a los empresarios y las empresas, que las forman también los trabajadores, los proveedores y los clientes. Hay que entender que si tenemos más empresa tendremos más productividad y esto promoverá un regreso social más elevado.
Uno de los hitos de los que estoy más satisfecho en mi tarea de presidente es haber conseguido desde Foment del Treball la conmemoración del Día de la Empresa, cada 27 de junio, porque hace falta este reconocimiento al empresario por su doble vertiente de creador de riqueza y de impulsor de ocupación. Y recuerdo cuando lo aprobó el Govern de la Generalitat, recuperándonos de la crisis que comportó la pandemia. Tenemos que insistir en el hecho de que los empresarios, las empresas de cualquier volumen, tenemos un rol fundamental para crear puestos de trabajo y por su contribución a la cohesión social. No es una afirmación fachenda, es un retrato de la realidad.
En el contexto de la incertidumbre y la dependencia energética europea es imprescindible trabajar para continuar mejorando la competitividad de la economía. Y los Fondos Next Generation representan una oportunidad única para la recuperación y la transformación de la economía y el próximo Gobierno tendrá que luchar para captar más recursos de esta fuente.
"Hace falta una dotación especial para la salud y las inversiones en infraestructuras"
Foment ya propuso hace semanas que hace falta una dotación especial para la salud y las inversiones en infraestructuras, especialmente destinadas a hacer frente a la sequía y promover acciones sostenibles que impulsen el desarrollo económico a largo plazo. Y en cuanto a la escasez hídrica y la gestión de la sequía reclamamos al Govern la ejecución de las infraestructuras y las inversiones establecidas en la Ley 9/2023 de "medidas extraordinarias y urgentes para afrontar la situación de sequía excepcional de Catalunya", estableciendo la tramitación por emergencia de acuerdo con el artículo 120 de la Ley 9/2017 de contratos del sector público la situación para ejecutarlas sin demora, agilizando los trámites administrativos y reduciendo la burocracia asociada. Se puede hacer y no se hace. Pero no nos quedamos en reproches, exigimos acción.
En el ámbito de la gestión de la oferta del agua, consideramos imprescindible proceder a la interconexión de redes en las diferentes cuencas hidrográficas de Catalunya y hacerlo sin apriorismos y con diálogo y transparencia. Ahora bien, sufrimos una situación urgente pero también estructural. Si mañana empezara a llover tendríamos un problema de gestión de agua de primera magnitud todavía. No es momento de parches.
"No nos quedamos en reproches, exigimos acción"
Una Catalunya más productiva pasa por tener una fiscalidad más competitiva. Y por eso no nos cansaremos de reclamar allá donde haga falta que se suprima el Impuesto del Patrimonio. Este impuesto disuade y distorsiona la actividad económica y su efecto redistributivo es muy menor. Además, esta figura tributaria ha desaparecido de los sistemas fiscales europeos, siendo dentro de la UE la única que lo tiene.
Es imperativo rebajar los tipos marginales del IRPF en Catalunya, tanto para las rentas altas (50%) como para las bajas (20%). Catalunya se sitúa en la parte alta de los tipos más elevados del conjunto de las comunidades autónomas españolas. Proponemos situarlos al nivel de comunidades más dinámicas. No se puede hacer política fiscal solo pensando en cuadrar los presupuestos públicos.
En esta línea pedimos situar el tipo impositivo del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones en el 5% para los parientes próximos, y del 10% para el resto. Además, resulta imprescindible revisar los impuestos propios de la Generalitat y suprimir algunos de ellos. La situación de la financiación de la Generalitat se tiene que mejorar y esto se hace con un diálogo propositivo y decidido, y sin politiquería. En este sentido, en Foment hemos iniciado hace pocas semanas un grupo de trabajo para calcular las Balanzas Fiscales. Varios expertos de varios lugares de España y con tradiciones académicas diferentes se han puesto de acuerdo en iniciar el cálculo y para empezar piden al Estado todos los datos posibles para poder efectuar el análisis. Sin apriorismos y con rigor científico.
Hacer las cosas bien hechas da réditos más pronto que tarde, no es cuestión de tener prisa pero se tiene que actuar, no es momento de divagar, pero también es momento de tener la mirada larga. Hace falta más empresa para tener un país más competitivo.