La lucha contra el cambio climático siempre me ha preocupado, y ante empresas y administraciones he promovido el mensaje de la necesidad de cuidar el medio ambiente y avanzar hacia modelos de crecimiento sostenible. Hay muchas vías para lograrlo, desde la transición energética y la electrificación del transporte hasta la economía circular. Pero poca gente sabe que contamos con un grupo de aliados invisibles, a miles de kilómetros de altura, que nos pueden ayudar en este reto que enfrenta la humanidad: los satélites.
Desde el lanzamiento del Sputnik por parte de la Unión Soviética durante la Guerra Fría, la puesta en órbita de satélites artificiales es uno de los pasos adelante más relevantes de la carrera espacial. Los usos que hacemos hoy en día son innumerables: telecomunicaciones, cartografía, geolocalización, defensa y seguridad, protección de incendios... muchos servicios y tecnología que utilizamos funcionan, directa o indirectamente, gracias a la intervención de un satélite.
"Contamos con un grupo de aliados invisibles, a miles de kilómetros de altura, que nos pueden ayudar en este reto que enfrenta la humanidad: los satélites"
Detrás del desarrollo de los satélites y las aplicaciones relacionadas hay un ecosistema empresarial muy rico, caracterizado por ser muy intensivo en investigación, innovación y tecnología. Tradicionalmente dominada por las grandes agencias espaciales y multinacionales, recientemente en esta industria han comenzado a abrirse paso pymes y startups que fabrican tecnología espacial y nanosatélites. Se trata de la Nueva Economía del espacio o New Space.
A lo largo de su historia, la Cámara de Comercio de Barcelona ha promovido nuevos sectores económicos con potencial y creemos que el New Space tiene grandes perspectivas de crecimiento. Es un sector que va creciendo cada vez más en Catalunya, gracias al alto nivel tecnológico e innovador de Catalunya. Y lo más importante: es un sector que promueve otros modelos de negocio y del que pueden aprovecharse otras empresas para crecer.
La Cámara quiso dar un impulso a esta industria con la fundación de una comisión y en 2020 celebró la primera jornada de la New Space Economy. La buena acogida de esta iniciativa, con más de 200 asistentes, llevó a pensar aún más en grande, y en 2022, esta jornada se convirtió en un congreso internacional coorganizado con la Generalitat de Catalunya. Hoy el congreso del New Space catalán se ha convertido en una cita de referencia estatal, un éxito que es fruto de la colaboración con entidades como el Institut d’Estudis Espacials de Catalunya y el Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya, entre otros.
Los días 1 y 2 de octubre el congreso celebra su tercera edición en La Llotja de Mar, consolidado como un punto de encuentro no solo de las empresas espaciales, sino también de empresas de otros sectores que quieren descubrir los beneficios de la tecnología espacial. Además de acercar el New Space al resto del ecosistema empresarial, el congreso es un foro de conocimiento sobre las aplicaciones del espacio. Uno de los temas centrales del evento es, precisamente, cómo la tecnología espacial nos puede ayudar en la carrera por la sostenibilidad.
"Además de acercar el New Space al resto del ecosistema empresarial, el congreso es un foro de conocimiento sobre las aplicaciones del espacio"
Gracias a los satélites de observación de la Tierra, se pueden medir con más precisión y eficacia los efectos del cambio climático. Este año se pondrá el foco en cómo los datos de los satélites pueden contribuir a una mejor gestión del agua, un tema crucial para asegurar la supervivencia del planeta y de plena actualidad, dada la sequía sin precedentes que este año está sufriendo Catalunya. La razón es que la tecnología espacial puede, por ejemplo, ayudar a prever inundaciones, pero también anticipar el deterioro de los recursos hídricos y planificar el diseño de infraestructuras de abastecimiento y saneamiento de agua.
En resumen, el espacio es una oportunidad para impulsar la transformación de la economía hacia modelos más internacionalizados de mayor valor añadido, basados en la tecnología y la ciencia. Y debemos saber aprovecharlo. Desde la Cámara, trabajaremos para fortalecer este sector emergente, promoviendo la colaboración entre empresas y difundiendo los beneficios y oportunidades que ofrece, tanto para el ecosistema económico empresarial como para la sociedad en general.