Mientras que en Catalunya los resultados de las pruebas del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA), que se lleva a cabo cada tres años por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), ha traído cola durante el Puente de la Purísima, hay estudiantes de la pequeña ciudad-estado asiática de Singapur que han obtenido los mejores resultados del mundo. Y han superado de largo a los "sospechosos habituales" de los últimos años: Japón y Finlandia.
En primer lugar, el objetivo de las pruebas PISA consiste en medir las habilidades y el conocimiento de los estudiantes de 15 años en matemáticas, lectura y ciencia. Y, en esta ocasión, Singapur se corona de largo con más de 39 puntos por encima en lo que se refiere a las matemáticas, respecto al segundo clasificado. Otros países que han logrado buenas puntuaciones entre los 81 estados y regiones evaluadas han sido el enclave chino de Macao, Taiwán, Japón, Corea del Sur y Estonia. Todos ellos se han ubicado entre los diez primeros puestos en cada una de las tres categorías principales.
Singapur, un caso único en el mundo
Los resultados de los estudiantes de Singapur son casi excepcionales. En primer lugar, el informe ha registrado una caída global de 15 puntos, hasta 472, en la media de matemáticas de los estudiantes de los países y regiones evaluadas, en comparación con los anteriores exámenes realizados en 2018 y cuyos resultados se publicaron el 2019.
La pandemia de la covid-19 y las medidas que las autoridades impusieron para hacerle frente son la explicación que desde la OCDE dan para este retroceso sin precedentes. En el informe también se han extraído lecciones para abordar crisis futuras. "Cierres de escuelas más breves, menos obstáculos para el aprendizaje remoto y la continuidad en el apoyo de los docentes y de los padres", han sido las razones que se han dado en el informe para los 31 países que han logrado avanzar o al menos mantener sus resultados de hace cuatro años.
¿Por qué lidera Asia?
Los resultados de PISA han confirmado que los países asiáticos se han convertido en potencias en materia educativa. Así seis de los primeros diez puestos han sido ocupados por países de esa región (Singapur, Japón, Corea del Sur, Taiwán, Macao y Hong Kong), como se ha mencionado anteriormente.
La pandemia de la covid-19 y las medidas que las autoridades impusieron para hacerle frente son la explicación que se da para este retroceso sin precedentes
El caso de Singapur es particular. Con un Producto Interior Bruto (PIB) per cápita de 72.794 dólares, de acuerdo con el Banco Mundial; y una población de poco menos de 6 millones de habitantes, la pequeña ciudad-estado es uno de los países más ricos del mundo. Un fenómeno que también se ha abordado en el ranking de las ciudades más caras del mundo (que ni los ricos se atreven a vivir en él).
Como curiosidad, y respecto a Singapur, un reciente informe de The Economist Intelligence Unit apunta a que un coche nuevo puede costar hasta 100.000 dólares, y el alquiler de un apartamento alejado del centro puede alcanzar la cifra de 1.885 dólares mensuales. Además, el país es también uno de los que menos impuestos cobran del mundo. En cuanto al Índice de Desarrollo Humano o IDH, que elabora Naciones Unidas para medir el progreso de un país y que en definitiva muestra el nivel de vida de sus habitantes, indica que los singapureses se encuentran entre los que tienen mejor calidad de vida. Si la razón para visitar Singapur son negocios, es útil saber que Singapur es el segundo país por facilidad para hacer negocios, según el ranking Doing Business.
El mejor sistema educativo de Europa tiene nombre: Estonia
Los datos anteriores podrían indicar que el poder económico es un requisito indispensable para tener un buen sistema educativo. Y aunque en el informe se admite que el primero contribuye al segundo, también se deja claro que los recursos económicos no son imprescindibles para tener una enseñanza de calidad. El caso de Estonia, que ocupa la séptima posición en matemáticas, la sexta en ciencias y también la sexta en comprensión lectora (en este caso tiene por delante a Irlanda), corrobora esta tesis.
Según el informe PISA, Estonia tiene el mejor sistema educativo de Europa. Este diminuto estado exsoviético supera a Francia, Alemania, España, Finlandia y Reino Unido. Pese al gasto relativamente bajo en educación, el país es de los primeros del mundo en las tres áreas de referencia con las que se elabora este informe. Las escuelas también son las más igualitarias. En Estonia, la procedencia socioeconómica influye menos que en cualquier otro país, según la OCDE. Y los alumnos parecen más felices. Un estudio de la Gregson Family Foundation indica que Estonia es uno de los cinco únicos países cuyos alumnos consiguen excelentes resultados y, al mismo tiempo, están muy contentos con sus vidas.
Estonia tiene el mejor sistema educativo de Europa y la procedencia socioeconómica influye menos que a cualquier otro país
En su día, el Gobierno realizó las inversiones necesarias para que todas las escuelas estuvieran equipadas con dispositivos electrónicos y una buena conexión a Internet. Hay una biblioteca nacional en la Red con más de 20.000 títulos educativos en los que maestros, especialistas, académicos y editores aportan recursos bajo la supervisión de un grupo de expertos. Los maestros son libres de utilizar y adaptar estos materiales para sus clases, y padres y alumnos tienen acceso desde casa. Además, las escuelas de Estonia tienen gran autonomía, hasta el punto de que los directores deciden por cuenta propia los planes de estudio y los horarios del alumnado.
El retroceso de Europa y Catalunya
Finlandia, que en las ediciones anteriores de PISA aparecía como el modelo educativo del Viejo Continente, ha experimentado un serio descalabro que desde el informe se atribuye al aumento en el número de estudiantes de origen inmigrante. España, por su parte, ha obtenido su peor resultado en matemáticas desde que la prueba educativa, la más importante del mundo, se empezó a publicar en 2000. Los estudiantes españoles han perdido 8 puntos en esta asignatura y tres en comprensión lectora respecto a lo que consiguieron en el 2018. Sin embargo, han subido dos puntos en ciencias.
De hecho, esta semana han saltado las alarmas con titulares como por ejemplo “Catalunya naufraga en las pruebas PISA de 2022”. Los resultados caen en picado, con resultados muy preocupantes, en los tres ámbitos de evaluación y sitúan al alumnado catalán por debajo de la media de España y de los países de la OCDE. El informe publicado destapa que en competencia matemática Catalunya ha obtenido 469 puntos -21 menos respecto a las últimas pruebas, realizadas en 2018-. El dato ya se sitúa como el más bajo desde 2006. En cuanto a la competencia científica, ha obtenido 477 puntos, 12 menos que en 2018, y el peor dato desde 2003. Por último, en comprensión lectora también ha registrado el peor nivel de lectura desde 2006, con 462 puntos, 22 menos que en 2018, y situándose en las últimas posiciones del Estado sólo por delante de Andalucía, con 461, Melilla, con 405 y Ceuta, con 404.