Chipsfotónicos para crear sistemascriptográficos más seguros. Carlos Abellán es ingeniero en telecomunicaciones por la UPC y lidera Quside, una spinoff del Institut de Ciències Fotòniques (ICFO) que batalla con física cuántica contra los hackers del futuro. Su iniciativa empresarial ha merecido ganar el premio Aijec de este año.
Abellán es un enamorado del maridaje entre criptografía y cuántica. La criptografía es un "arte" que protege la información, permite que "nos podamos comunicar a través de internet de una manera segura y privada".
La criptografía actual (e histórica) se basa en "la complejidad de algunos problemas matemáticos, que requieren muchos cálculos y no hay una manera eficiente de resolverlos". La criptografía actual se basa en encontrar los números que conforman una ecuación el resultado de la cual es un número muy elevado. "Si tenemos ordenadores cada vez más potentes, estos problemas se podrán resolver? Esto seria catastrófico, significaría, por ejemplo, que no podríamos enviar emails seguros", vaticina. Cada vez es más fácil resolver problemas matemáticos complicados con tecnología. Code makers vs. code breakers.
Abellán ha creado un chip fotónico capaz de generar números aleatorios basándose en la física cuántica para comunicaciones seguras
"Sabemos que si alguien consiguiera desarrollar un ordenador cuántico, podría resolver de manera muy sencilla este problema de la factorización de números, y ya hay empresas trabajando en esto", prevé. Pero un algoritmo también podría romper la criptografía.
La mecánica cuántica es una teoría física que describe como funciona el mundo de los átomos y los fotones. "La física clásica newtoniana no se aplica a estas partículas, no permite explicar su comportamiento", explica Abellan para describir la mecánica cuántica. Cómo se cocina este cóctel?
El campo de especialización de Abellán trabaja para desplegar sistemas de criptografía basados en la física cuántica. "Usando las propiedades de este mundo microscópico podemos crear sistemas criptográficos nuevos que nos otorguen una seguridad más alta", explica.
Y aquí entra Quside. Esta startup nace de un grupo de investigación del ICFO, donde Abellán cursó un doctorado en tecnologías cuánticas. Allí investigaban para desarrollar tecnologías cuánticas para comunicaciones seguras. El emprendedor creó un dispositivo capaz de crear números (unos y ceros) aleatorios basándose en las leyes de la física cuántica. Quside es la empresa que crea este tipo de generadores aleatorios, son chips semiconductores que emplean fotones en vez de electrones para funcionar. "Estos chips los integran nuestros clientes en sistemas más completos, como por ejemplo un servidor en un centro de datos", detalla. Chips fotónicos para mejorar la seguridad de las comunicaciones.
Quside se funda a finales del 2017 y está situada en el Parque Mediterráneo de Tecnología en Castelldefels en 200 metros cuadrados de oficina y laboratorio. Un año más tarde la plantilla era de ocho personas y actualmente ya se ha casi duplicado.
Cuántica de consumo
El año pasado Microsoft anunció que quería instalarse en Barcelona para desarrollar un ordenador cuántico. Europa no quiere quedarse atrás en el campo de la cuántica, por eso lanzó el proyecto Quantum Flagship con una inversión de 1.000 millones de euros a diez años y del cual Quside forma parte. "Hemos sido seleccionados en dos proyectos de este marco", destaca.
"Queremos llegar a producir nuestros chips a la escala de la electrónica de consumo"
"Lo único que queremos es producir infraestructuras para comunicarnos de manera segura a través de internet, queremos llegar a producir nuestros chips a la escala de la electrónica de consumo", comenta sobre los objetivos de futuro de la empresa, "hacer escalable por primera vez un dispositivo cuántico".
Dar a conocer esta investigación y la iniciativa empresarial que hay detrás es la misión de los premios Aijec. "Tenemos una tecnología muy puntera y poco conocida, el premio Aijec es una muy buena oportunidad para darla a conocer, que es de aquí y que crea lugares de trabajo, a parte de ser un honor", apostilla.