Con menos de dos años de vida, la startup de gafas hechas a mano Project Lobster prevé salir de Barcelona y València e ir a la conquista de Madrid, Sevilla, Bilbao, Málaga y Murcia. En total, las previsiones incluyen una veintena de tiendas nuevas en el Estado español entre 2020 y 2021, un plan que también contempla crecer en Barcelona -donde actualmente tiene dos establecimientos- y en València -donde hay uno-.
La facturación prevista para los próximos cinco años es de 15 millones de euros, según ha explicado el fundador y consejero delegado de la empresa, Oscar Valledor, en una entrevista en EuropaPress. La entrada en Madrid será en verano de 2020 con más de una tienda. Más allá de estos dos años, la vista se pone en Europa, con la intención de expandirse en países como Reino Unido, Francia, Alemania y Suiza.
De hecho, las tiendas físicas son responsables de un 80% de la facturación de Project Lobster, mientras que el ecommerce sólo representa un 20% de las ventas. La propuesta de la startup se basa en la eliminación de los intermediarios para confeccionar las gafas, hecho que permite ofrecer unos precios más ajustados.
Actualmente, Project Lobster cuenta con 14 trabajadores y prevé una facturación inferior al millón de euros este 2019. Como novedad, tiene previsto empezar a vender lentillas. En julio cerró su primera ronda de financiación, de 300.000 euros, y no descartan hacer más.
Project Lobster arrancó después de ganar el programa YUZZ Jóvenes Emprendedores de la Universitat Pompeu Fabra y el Banco Santander. La startup también ha formado parte de Lanzadera, la aceleradora de Juan Roig, presidente de Mercadona. Actualmente, cuenta con el apoyo de Netmentora Catalunya.