Las bobinas de fibra óptica vacías de la empresa de telecomunicaciones Iguana han pasado de la desechería a disfrutar "de una segunda oportunidad". El operador anoiense se ha aliado con la Fundación Àuria en una nueva iniciativa que permite a jóvenes con diversidad funcional, usuarios de un programa para fomentar la inserción laboral, reaprovecharlas. De ellas hacen desde mesas a fichas de dominó, un hecho que además de potenciar su creatividad, les permite desarrollar otras competencias. No sólo aprenden la importancia de la reutilización, a medir o a cortar, sino que si se equivocan, "se puede poner solución", explica a la ACN el orientador de la Fundación Àuria, Salvador Salla.
En pleno auge en la Anoia, Iguana buscaba una manera de "revalorizar" las bobinas vacías de madera, que cada vez eran más. La alianza con Àuria, explica el socio fundador de la empresa de telecomunicaciones, Aleix Solé, les ha permitido dejar de tirarlas y darles "una segunda oportunidad". "Es una manera de aportar nuestro granito de arena a la economía circular del territorio", añade.
La Fundación Àuria recoge las bobinas de las instalaciones de Iguana, en Igualada, y las lleva hasta el centro de formación de Masquefa, donde la entidad pilota el programa Singulares de Garantía Juvenil, destinado a la formación e inserción de jóvenes con discapacidad funcional. El programa, especifica su coordinador, Moisès Castells, pretende enseñarles diferentes habilidades que les ayuden a encontrar trabajo, entre las cuales está la creatividad. Y es aquí donde las bobinas de fibra óptica han podido revivir.
Salvador Salla, orientador de Àuria y responsable de esta parte creativa del programa, explica que empezaron, ahora hace un año, con paliers, pero que el acuerdo con Iguana les ha permitido disfrutar de mejor material a coste cero. Salla asegura que el taller "reúne muchos requisitos, competencias tecnico-profesionales cemo son medir, cortar o crear la pieza". añade la importancia del material con el que trabajan, la madera. "Cualquier trozo te sirve para crear", apunta.
De momento, los jóvenes han creado mesas. Estela Escolà, alumna del programa, explica que incluso pintaron una de irisada para conmemorar el día del orgullo gay. Ahora están haciendo piezas de dominó y tienen en la cabeza también hacer butacas. "Es entretenido y reciclas", dice la joven.
Abel Torres, también alumno, explica que es una actividad "fácil", pero que obliga a concentrarse "para no liarla". "Aprendemos creatividad, imaginas que puedes hacer con un trozo de madera y lo puedes poner en práctica", asegura.
Tres cursos de inserción laboral
Este es el tercer curso del programa Singulares de Garantía Juvenil de Masquefa, promovido por el Ayuntamiento de la localidad y gestionado por Fundación Àuria y Fundación Privada Balmes. Se dirige a jóvenes, de entre 16 y 29 años, con dificultades para seguir los aprendizajes a través del sistema educativo formal y busca favorecer su inserción laboral. Este año cuenta con 17 alumnos que dan clase en las aulas formativas están ubicadas a la planta baja del edificio del Hogar de Niños Francesc Mata y Sanghés, a La Bebida Alta.
El curso, explica Castells, busca proporcionarlos competencias para ayudarlos a encontrar trabajo y mantenerla. Además de la creatividad, aprenden habilidades sociales y académicas. "No sólo se los enseñan técnicas, sino también aprenden a ser más autónomos", dice. Cerca del 30% de los alumnos acaban encontrando trabajo.
Bobinas por el patio de la escuela
Las bobinas de Iguana, pero, han encontrado más utilidades además de Àuria. Algunas escuelas de la comarca, como el Ateneo Igualadí o los centros de Sant Martí de Tous y Capellades, las ha pedido y las han reconvertido en mobiliario para el patio de la escuela.