Barcelona Activa ha asesorado un total de 400 establecimientos de la ciudad para encarar la etapa puesto-pandemia. Mediante lo programa Comerç a punt, la entidad municipal ha ayudado a los establecimientos a desarrollar nuevas fórmulas de negocio para reactivarse mediante el acompañamiento individualizado y personalizado.
La agencia ha ofrecido a restaurantes, establecimientos de ropa, supermercados y otros comercios locales una evaluación de sus puntos fuertes y debilidades, en función de los cuales los asesores de la agencia han ayudado a elaborar un plan de acción personalizado por cada negocio. Estas hojas de ruta incluyen, según el Ayuntamiento, estrategias de captación de clientes, diseño del local, mejoras en la financiación, así como impulso de nuevos modelo de negocio.
Los distritos donde más comercios se han acogido a Comercio a punto han sido Ciutat Vella, el Ensanche, Santo Andreu y Santo Martí, a pesar de que Barcelona Activa ha atendido locales y negocios por todos los barrios de la ciudad. Además, 380 comercios han sido atendidos por los asesores del consistorio intermediado un modelo de acompañamiento virtual.
Además de las propuestas de Comerç a Punt, el Ayuntamiento también tiene en marcha el Plan de Digitalización del comercio de Barcelona, mediante el cual asesora los usuarios en la creación de planes digitales, además de una oferta formativa con 50 recursos para los empresarios. Barcelona Activa implementa estos proyectos, y otros en la línea, con el objetivo de ayudar un sector, dicen, "especialmente afectado por la crisis".