El proyecto Vida Profesional, impulsado por Barcelona Activa y el Consorcio de la Educación, pone en marcha este año nuevas formaciones dirigidas a la juventud. El plan ofrecerá nuevos itinerarios en escuelas y estudiantes que cursan la secundaria obligatoria y post obligatoria, en un contexto en que la tasa de paro juvenil se sitúa en el 28,5% en la ciudad condal.
Cada año, alrededor de 13.000 jóvenes pasan por este programa, que incluye desde visitas a empresas, participación en sesiones de emprendeduría, asesoramiento y formaciones con tutorías. Las personas nacidas a finales del siglo XX y principios del XXI, catalogadas como Generación Z o post-millennials, obtienen competencias y conocimientos, en el marco de la industria 4.0.
El proyecto Vida Profesional quiere ser una herramienta para luchar contra el fracaso y el abandono escolar. Dejar de manera prematura los estudios se asocia a un mayor riesgo de paro, a precariedad laboral, a situaciones de pobreza y de exclusión social y a una mayor dependencia de ayudas sociales. Después de 15 años en funcionamiento el plan ha querido renovarse y así lo asegura Raquel Gil, comisionada de Promoción de la Ocupación y Políticas contra la Precariedad del Ayuntamiento: "Hay que incorporar nuevos incentivos que ayuden las personas jóvenes a conocer la realidad de las empresas, del mundo del trabajo y ofrecerles el máximo de posibilidades para evitar las desigualdades y mejorar las elecciones profesionales".
Gil: "Hay que incorporar nuevos incentivos que ayuden las personas jóvenes a conocer la realidad de las empresas"
El proyecto se dirige principalmente a alumnos de todos los centros educativos de Barcelona, tanto públicos como privados. Aun así, también se ofrecen gran parte de las actividades a los centros de fuera de la ciudad que lo soliciten. Uno de los retos a partir del curso actual 2020/2021 es ampliar el público destinatario de este proyecto a estudiantes todavía más jóvenes, de 1º y 2º de la ESO.