La catedral de Girona ha llegado a los 220.000 visitantes este 2023 y espera cerrar el año con cifras como las del 2019 donde se alcanzaron los 243.000 visitantes y que es el récord del templo. La catedral es uno de los monumentos más visitados de las comarcas gerundenses y que, a la vez, acoge también muchos estudiantes de escuelas y de institutos de la demarcación y de fuera.
El gerente de la catedral, Gustau Torres, celebra que se hayan recuperado las cifras de turistas que había antes de la pandemia. Más allá del visitante de proximidad y el resto del estado, el francés es un público importante y representa cerca del 25% de quienes se acercan a ver el templo. A pesar de que Navidad y fin de año es una época bastante concurrida, la mayor parte de los visitantes se concentra en verano. La mayoría están interesados en la arquitectura de la catedral que "tiene bastante renombre en Europa".
El público francés representa cerca del 25% de los visitantes que se acercan a ver el templo
Desde la catedral explican que el perfil de visitante conoce el templo y se ha informado antes de llegar por su singular arquitectura y la anchura característica de la nave, pero hay pocos que conozcan el patrimonio que hay dentro de ella, como el tapiz de la creación.
Los estudiantes también suben
En el 2019 no solo se logró una cifra récord de turistas si no también de estudiantes. En este sentido, se superaron los 5.000, unos números muy similares a los de este 2023. De hecho, todos los alumnos de escuelas y de institutos de la diócesis tienen la entrada libre al templo y los que no lo sean, se les cobra 1,5 euros por estudiante.
La pandemia provocó una bajada muy importante de visitantes, pero no de estudiantes que, en proporción, fue más suave. El motivo, explica Torres, es que la catedral fue uno de los puntos de visita preferidos de los centros educativos cuando las restricciones de movilidad afectaban a la ciudad o a la demarcación.