Cecot ha aplaudido la nueva ley concursal aprobada por el Congreso de los Diputados sobre marcos de reestructuración preventiva, exoneración de deudas e inhabilitaciones. "Es una reforma largamente esperada por los representantes empresariales y que cuenta con el apoyo de gran parte de los agentes económicos y agentes sociales preocupados para conseguir fortalecer el tejido empresarial catalán, también por la vía de la segunda oportunidad o la mejora del procedimiento concursal", destaca la patronal vallesana en un comunicado.
El presidente de la Cecot, Xavier Panés, reclama una "apuesta social conjunta para evitar la estigmatización" de las empresas que tienen que entrar en un proceso de reestructuración: "Siempre hemos dicho que tan importante es impulsar la creación de empresas cómo hacer los máximos posibles para mantener y ayudar las empresas que hace años que están desarrollando su actividad". Este estigmatización, señala, provoca más dificultades para evitar el cierre de una compañía que atraviesa dificultades puntuales.
"Tenemos que ser capaces de cambiar expresiones del tipo esta empresa está tocada por expresiones más asertivas que eviten penalizar el proceso de superación de una incidencia o dificultad", enfatiza Panés.
Las novedades de la nueva legislación concursal
Uno de los cambios legislativos que desde la patronal Cecot se considera de mayor importancia es la introducción de los planes de reestructuración que, tal como prevé la ley, tienen que constituir un instrumento preconcursal importante, dirigido a evitar la insolvencia, actuando en estadios previos a la situación de concurso. "En este punto toman importancia mecanismos de apoyo a las empresas como por ejemplo el Helpempresa, que mediante un diagnóstico previo detecta posibles debilidades en la organización, anticipa soluciones a manera de actuación preventiva", remarca el presidente de la patronal.
Adicionalmente la reforma de la ley prevé la introducción del procedimiento concursal especial para micropimes, dejando en manos de la misma microempresa la gestión del concurso, prescindiendo de administradores concursales, abogados y procuradores. Según Cecot, esto suponerà una reducción de tiempo y coste de los procesos concursales, pero, a la vez, significará que la microempresa concursada tenga que autogestionar su concurso.
La segunda oportunidad y las deudas
También se considera innovadora la aparición de la figura del experto en la reestructuración, de nombramiento voluntario, a excepción de algunos casos que es obligatorio. La persona que ejerza este cargo no hace falta que sea administrador concursal y tendría que permitir agilizar los procedimientos concursales y ayudar a las empresas en esta situación en todos los trámites legales necesarios.
"Es de especial importancia el procedimiento de segunda oportunidad, que amplía la relación de deudas exonerables e introduce la posibilidad de exoneración sin liquidación previa del patrimonio del deudor, y con un plan de pagos, permitiendo así que este conserve su vivienda habitual y sus activos empresariales", añade la Cecot. La introducción de un prepack concursal, la reducción de los plazos del procedimiento concursal y el exonareció de las deudas con la Agencia Tributaria y Seguridad Social son otros aspectos que destaca la patronal.