La Denominación de Origen del Alt Empordà ha empezado la vendimia de sus viñas en un año en que prevén que la uva tenga una "calidad excepcional". Así lo ha asegurado el presidente de la Comisión de Promoción del Consejo Regulador de la DO Empordà, Toni Roig, quien también ha afirmado que se recogerá más uva de lo habitual. De todas maneras, Roig ha recordado que "la vendimia es muy larga" y habrá que estar pendientes del tiempo que hará durante todo el septiembre y la primera mitad de octubre.
Aún así, el presidente de la Comisión de Promoción ha destacado que "la lluvia abundante de la primavera y puntual durante el verano" ha traído a esta uva "por encima de la media" que ayudará a tener unos vinos con "más aromas y sabores más intensos", puesto que las viñas no han sufrido estrés por la carencia de agua. Así, la previsión es que se superen los 60.000 hectolitros anuales que recogen las bodegas de la DO.
En cuanto al tipo de uva, Roig calcula que será de una medida pequeña, hecho que comporta la "concentración de sabores y aromas" que acabarán desarrollando en "vinos más estructurados". Además, la uva cuenta con un "perfecto estado de salud". Por todo esto, el presidente de la Comisión de Promoción ha asegurado que la vendimia de este año dará una uva "de calidad excepcional".
Esta calidad se debe de a "la lluvia abundante de principios de primavera y los chubascos puntuales durante el verano". Las oleadas de calor de los últimos meses han tenido una afectación mínima a las viñas del Empordà y la mayoría de plantas de la denominación no han sufrido estrés hídrico -carece de agua-. Y las intermitentes lluvias de los meses de julio y de agosto han facilitado una maduración esglaonada y tranquila de la uva.
Pero ahora hay que ver si la meteorología no lo estropea todo. Los vinicultors están a la expectativa del tiempo que hará durante septiembre -que es cuando se recoge la mayor parte de la uva- y la primera mitad de octubre.
Toni Roig ha remarcado que durante la vendimia, las tormentas "son un riesgo" porque con una granizada se puede llevar buena parte de los colgantes de uva. Además, un exceso de lluvia tampoco es bueno, porque "pueden haber humedades que hacen pudrir parte de la cosecha". Aún así, los productores de la DO Empordà están satisfechos por las perspectivas de los próximos días, puesto que el frente de lluvias previsto "irá acompañado de viento" y en l'Empordà "va bien" porque se minimiza el riesgo de lluvia debido a las fuertes tramuntanades que hay.
Variedades autóctonas, las mayoritarias
El almez -nombre local que recibe la garnatxa- es la variedad más mayoritaria en el Empordà y representa una tercera parte de la viña ampurdanesa con 572 de las 1.768 hectáreas plantadas. Destaca especialmente la garnatxa negra con 377 hectáreas, seguida de la blanca, con 88, y la roja, con 61. Las carinyenes -nombre local que reciben las carinyenes- son la otra variedad más representativa de l'Empordà, con 402 hectáreas, es decir, el 22% de total.
La denominación ampurdanesa puede presumir de una riqueza de variedades exclusiva, puesto que es una zona vinícola que produce todas las variedades de almeces y carinyenes.
Hoy en día, las variedades autóctonas representan cerca del 65% de todas las viñas de la denominación de origen. El porcentaje de las variedades tradicionales no ha dejado de crecer en los últimos años gracias a la apuesta decidida de los viticultors ampurdaneses por el almez, la carinyena, el macabeu o el moscatel.
Seis millones de botellas vendidas al año
La Denominación de Origen Empordà vende anualmente cerca de 6 millones de botellas. Concretamente el 2018 se vendieron un total de 5.939.296 botellas en todo el mundo, una cifra que representa un incremento del 6% respecto al año anterior con un aumento especialmente significativo en Catalunya, con un 9%.