Si hay un sector que ha vivido en primera persona la crisis económica, este es el inmobiliario. Pero a menudo las dificultades son el mejor incentivo a la innovación, y de este momento complejo por el sectoremerge con fuerza un nuevo concepto: el personal shopper inmobiliario.
Enric Jiménez trae más de 20 años dentro del sector inmobiliario, donde ha representado todos los papeles del auca. El 2010 detectó una necesidad: "Las inmobiliarias se enfocan al producto, por qué no empezar a ayudar los compradores?", explica orgulloso. De este modo nace SomRIE, una empresa pionera que se sitúa junto al comprador en todo el proceso de adquirir un activo inmobiliario y que ya cuenta con más de 20 colaboradores.
El perfil del 'personal shopper': con experiencia e idiomas
Para ser personal shopper inmobiliario, Enric Jiménez destaca las características imprescindibles: "Profesionales autónomos, con amplia experiencia al sector inmobiliario y que hablen idiomas".
Su tarea? La respuesta no se aleja mucha de la que puede ofrecer su homónimo en el sector de la moda. Es alguien que asesora en todo momento el potencial comprador: hace una primera selección de los inmuebles que pueden encajar en el que busca el cliente, negocia el precio y apoya en todos los trámites legales y administrativos.
Junto al comprador
Y todo ello por un precio fijo dentro de una tarifa plana acordada con el cliente previamente. "No vamos a porcentaje porque buscamos el mejor precio por el cliente", explica Jiménez. De este modo el cliente tiene la certeza que no se hinchará el precio para aumentar los honorarios del personal shopper.
Por el socio fundador de SomRIE, su tarea se vertebra en "cuatro pilares de ahorro por el comprador: tiempo, dinero, dolores de cabeza y conflictos de intereses". Un ahorro que se traduce de media en un 70% menos de visitas, un 20% sobre el precio de salida y una drástica disminución de preocupaciones burocráticas. Además, "el hecho que no tengamos ningún activo inmobiliario garantiza que siempre buscamos la mejor opción por el cliente y no la mejor de las que tienes en cartera", sentencia.
Para todos los públicos
Los principales clientes de este servicio acostumbran a ser de clase mediana-alta: inversores, directivos o empresarios. El hecho que la nueva Ley del Emprendedor contemple conceder el permiso de residencia si se realiza una inversión inmobiliaria superior a los 500.000 euros, ha provocado un auge de este tipo de clientes.
El personal shopper ha llegado al Meeting Point, como explica Enric Jiménez: " somos para intentar normalizarlo, que no se vea como un servicio elitista, sino que puede ser útil a cualquier que busque un activo inmobiliario". "Podemos ofrecer un valor añadido a varios públicos", asegura el fundador de SomRIE. "Al inversor extranjero le evitamos el dolor de cabeza burocrático, al directivo le ahorramos tiempo y a la parelleta le ahorramos dinero", concluye Jiménez.